La aerolínea estadounidense Spirit Airlines se declaró en bancarrota para intentar recuperarse de la caída en los viajes causada por la pandemia y el intento de vender la aerolínea a JetBlue. ¿Esto significará cancelaciones de vuelos?

Según informó Spirit hoy en su página web, los vuelos, la venta de billetes, las reservas y el resto de operaciones prosiguen con normalidad pese a la quiebra.

“Spirit espera continuar operando su negocio con normalidad durante este proceso preestablecido y simplificado del Capítulo 11. Los clientes pueden seguir reservando y volando sin interrupciones, y podrán utilizar todos los boletos, créditos y puntos de lealtad como de costumbre”, comunicó Spirit.

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Con sede en Dania Beach (Florida), Spirit anunció en un comunicado un acuerdo integral para reducir el apalancamiento de su balance y poder mantenerse en el mercado de vuelos de bajo coste. El acuerdo de reestructuración, indicó la empresa, cuenta con el apoyo de una gran mayoría de los tenedores de bonos y se hizo de modo voluntario.

En la nota, Spirit destacó su confianza en que esta reestructuración reduzca su deuda, proporcione una mayor flexibilidad financiera y permita mantener la actividad a largo plazo.

A finales de octubre pasado, la aerolínea anunció su intención de vender 23 de sus aviones por unos 519 millones de dólares, así como su propósito de despedir a parte de sus empleados.

La empresa informó a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Estados Unidos que el pasado 18 de octubre firmó un acuerdo con la multinacional GA Telesis para vender 23 aviones A320ceo y A321ceo, que están previstos que se entreguen entre octubre de 2024 y febrero de 2025.

Con el objetivo de “volver a la rentabilidad”, la compañía también planea disminuir en unos 80 millones de dólares sus costes anualizados, principalmente mediante una reducción de plantilla “acorde con el volumen de vuelos previstos” para el próximo año.

La aerolínea atraviesa una crisis financiera desde enero pasado, cuando Jetblue rompió su acuerdo para comprar la empresa por 6,600 millones de dólares; previamente, el Departamento de Justicia de Estados Unidos se había opuesto al acuerdo por infringir las leyes antimonopolio.

Recientemente, Spirit retrasó el plazo para refinanciar una deuda de más de 1,000 millones de dólares hasta finales de diciembre.

Spirit es la mayor aerolínea de bajo coste de Estados Unidos.