Aunque el Departamento de Agricultura logró poner en vigor un plan para estabilizar la industria lechera tras el cese de la producción de leche fresca de Suiza Dairy, un nuevo reto se anticipa para el próximo mes de noviembre.

El secretario Ramón González Beiró confesó a Primera Hora que para ese mes -y durante la época de invierno-primavera- aumenta la producción de leche en las vaquerías a alrededor de 1 millón de cuartillos quincenales y no tienen todavía una opción para procesarla.

El vaticinio es que, ante la situación actual en la que las procesadoras que están disponibles trabajan a máxima capacidad, “sería difícil manejar todo lo que se produce en la finca”.

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En la actualidad, Tres Monjitas ha asumido el control de la producción de leche fresca en el país, mientras Indulac y la procesadora VIDA de Suiza Dairy se hacen cargo de la leche ultrapasteurizada o UHT.

El problema que identificó González Beiró es que, “si las plantas están trabajando a capacidad y tienen la capacidad para procesar la leche, pero una de ellas se rompe, pues no tenemos redundancia ni tenemos capacidad para añadir esa producción (a otra planta). Así que por eso es que es necesario que haya otra operando”.

Las movidas de Agricultura van en la dirección de que Suiza Dairy reinicie su producción de leche fresca en Aguadilla, que es la única planta que quedó en operación tras la determinación de cierre temporal en medio de un conflicto huelgario que inició el 11 de junio pasado.

“Allí ellos tienen línea y ellos envasan allí, principalmente, medios galones y empaque familiar. No hacen litro. Pero, lo más que se vende es medios galones, así que sería una buena solución”, manifestó González Beiró.

Sin embargo, el titular aceptó que no han tenido éxito en las comunicaciones que han establecido con el gerente de Suiza Dairy en la Isla, Pablo Vallejo.

“Me dijo que, por el momento, no tienen planes” de reiniciar el procesamiento de leche fresca, reveló.

Específicamente, Vallejo ha establecido que operar bajo los marcos regulatorios impuestos por Agricultura “es imposible”.

“Como hemos dicho desde un principio, vamos a abrir (la planta) en tanto y en cuanto podamos resolver el tema regulatorio que está pendiente en el Tribunal federal. Solamente cuando tengamos ese resultado, vamos evaluar cuáles son los pasos a seguir”, sostuvo hace unos días cuando se dio fin a la huelga decretada por la Central General de Trabajadores.

En la demanda federal, entre otras cosas, Suiza Dairy pide que la corte “designe a otra persona, (que no sea de Agricultura), para dictar las órdenes de precios de la leche líquida y que adopte un mecanismo temporal, como una acumulación regulatoria modificada o una tasa de rendimiento temporal especial, para permitir a los procesadores recuperar la tasa de rendimiento perdida a la que tenían derecho desde 2015″.

Pese a este escenario, los esfuerzos de Agricultura no han cesado para identificar una opción para la leche que estaría disponible a finales de año y principio del venidero.

“Nuestro deseo es que reabra otra planta de leche fresca”, afirmó el secretario, al reiterar que la opción más oportuna es que Suiza Dairy entre en operaciones.

Asimismo, González Beiró aceptó que, más allá de la alternativa de Suiza Dairy, no tienen ningún otro plan hasta el momento para disponer de la leche cruda que estaría disponible. Aunque, dejó claro que decomisarla no será una opción.

“Cuando llegue el momento, esteremos preparados”, prometió.

En la actualidad, la producción de leche en la Isla es de seis millones de cuartillos quincenales, de los cuales 4.2 millones son procesados por Tres Monjitas para leche fresca y el restante se utiliza para leche UHT.

González Beiró informó que, ante el inicio de clases a mediados de agosto, Tres Monjitas aumentará su producción de leche fresca a 4.5 millones de cuartillos quincenales, lo que disminuiría un poco más la producción de leche UHT.

Según el ciclo de disponibilidad de leche cruda, son los meses de octubre y septiembre cuando las vacas tienen la más baja producción, debido al calor. Pero, desde noviembre comienza a incrementar nuevamente. Los meses de enero, febrero y marzo son los de mayor producción en las vaquerías ante las temperaturas más frescas. Ya en abril, comienza a descender nuevamente la leche disponible para ser procesada, según el ciclo detallado por el presidente de la Asociación de Agricultores, el ganadero Héctor Cordero.