Una casona de madera enclavada en un ambiente rústico del barrio Culebrinas de San Sebastián, da paso a uno de los establecimientos comerciales de mayor popularidad en la zona pues, además de la sabrosa propuesta en comida criolla, el lugar se convierte en una pista de baile.

Se trata de La Charca de Paly Ramos, un restaurante familiar revestido de elementos patrios, a donde se elabora casi una veintena de platos típicos que se degustan al compás de la música tropical, mientras el aire fresco del monte se cuela por las ventanas abiertas para unirse a la gran fiesta.

Pechuga de pollo al mojo con mamposteao y tostones.
Pechuga de pollo al mojo con mamposteao y tostones. (Xavier Garcia)

Su propietario es Leonardo Ramos Ortiz, un pepiniano que llegó de la diáspora en 2022, con la intención de establecerse de nuevo en su pueblo natal, tras vivir en Nueva Jersey durante casi cuatro décadas.

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Paly cruzó el charco cuando apenas contaba con 16 años, “porque mi papá decidió que nos mudáramos para allá, en donde terminé de estudiar”.

“Allá trabajé mucho desde jovencito, y tuve negocio de perfumería y joyería. Pero al principio fue un poco difícil por la cuestión del idioma. Además de que soy nacido y criado en el campo pues, fue bien chocante para mí, hasta que poco a poco le fui cogiendo la costumbre y me establecí”, contó el hijo de Flor Ramos Méndez y Antonia Ortiz Vélez.

“Estuve casi 40 años por allá y llevo un año y medio desde que regresé. La vida por allá fue muy buena, pero siempre extrañé mi tierra y por eso, venía todos los años a pasar la Navidad con mi familia”, expresó el hombre de 55 años.

Sin embargo, cuando tuvo la oportunidad de regresar a su tierra, no lo pensó dos veces.

“Yo vengo de una familia de comerciantes del barrio Alto Sano. Entonces, se me dio la oportunidad de regresar, tenía un poco de dinero ahorrado y tomé la decisión de comprarle esta propiedad a un primo hermano de mi papá”, apuntó el también padre de dos hijos.

Pechuga al ajillo con mamposteao y tostones.
Pechuga al ajillo con mamposteao y tostones. (Xavier Garcia)

“Esto siempre fue negocio de bebidas, se llamaba La Charca de Titi Ramos. Ahora, el nombre legal es La Charca Bar & Grill, pero todo el mundo lo conoce como la Charca de Paly Ramos, porque aquí hubo una charca por muchos años y estamos trabajando para volver a tenerla”, expuso.

En un entorno campestre, La Charca de Paly se caracteriza por su concepto sencillo que atrae a parejas, adultos mayores y familias con niños. Asimismo, sus muebles en madera, vistosos murales y elementos patrios como la bandera puertorriqueña y la de San Sebastián, se hacen parte de la propuesta del lugar.

Área del salón comedor.
Área del salón comedor. (Xavier Garcia)

El menú presenta casi una veintena de alternativas en platos principales, entre estos, “pechuga a la parrilla, pechuga en salsa criolla, pechuga al ajillo con mofongo hecho con plátanos de aquí o arroz mamposteao”.

“También tenemos mofongo con camarones y mofongo con churrasco y caldo. Hay una variedad extensa en la comida. El favorito es la chuleta can-can, que nosotros le pusimos la ‘Chuleta a La Charca. Ese plato lleva por encima un picadillo de pollo con cebolla. Se puede servir con arroz mamposteao o mofongo con caldo”, explicó.

Otro de los preferidos por los comensales es el churrasco y el filete de dorado con mofongo y caldo. “Esos platos se mueven mucho. Aquí todo es criollo y se prepara al momento”.

“En aperitivos, tenemos surtidos pequeños, medianos y grandes, que traen carne de cerdo frita, masitas de pollo, queso, pastelillitos, taquitos, papas fritas, sorullitos y bolitas de queso. En postres, hacemos flan de la casa de vainilla y de queso”, apuntó.

“En bebidas, tenemos de todo tipo; preparamos todos los cocteles, tragos mixtos y cervezas de todas clases. Nos especializamos piñas coladas y en el mojito tradicional, que lo hacemos con una receta que traje de Cuba”, detalló.

La operación, según Paly, genera 10 empleos directos, mientras que el restaurante acomoda a unos 150 comensales.

“Esto se ha convertido en la discoteca del Pepino porque aquí no hay salones de baile, sobre todo, familiar. Aquí yo no pongo reguetón, sino música de los 80 y 90 que es lo que se mueve, desde merengue, bachata y salsa. Abrimos de jueves a domingo, y los sábados hay música en vivo”, concluyó.

Para detalles: La Charca de Paly Ramos en las redes sociales o el 732-857-7079.