¿Tres Monjitas opera un monopolio al ser, en la actualidad, el único productor de leche fresca en la Isla?

Desde el punto de vista nutricional o desde el aspecto económico la premisa fue rechazada por expertos del tema.

En primera instancia, se destacó que hay múltiples alternativas disponibles para sustituir este importante producto de la dieta diaria de los boricuas o los nutrientes que aporta, principalmente el calcio.

El sustituto principal es la leche ultrapasteurizada o UHT, de la cual hay disponible dos marcas de producción local o varias marcas importadas desde los Estados Unidos.

También están disponibles las leches de cabra u oveja, el yogurt, los quesos, el tofú, así como otras leches veganas, como de soya, almendra, coco o avena, si se le añade el calcio necesario, enumeraron la educadora del Servicio de Extensión Agrícola, la nutricionista y dietista Reinilda Rivera, así como el presidente de la Asociación de Agricultores, el ganadero Héctor Cordero.

Mientras, el secretario de Agricultura, Ramón González Beiró, estipuló que desde punto de vista económico “el pueblo está protegido”.

“Aunque hay una sola elaboradora de leche fresca, la ORIL (Oficina para la Reglamentación de la Industria Lechera) tiene poder y capacidad de distribuir el abasto de leche entre las plantas existentes y controlar los precios. En un monopolio, la empresa que monopoliza establece y domina y maneja los precios y los abastos a su merced”, sentenció.

Gonzalez Beiró explicó que desde que Tres Monjitas asumió el control de la producción de leche fresca a medidos de junio no ha solicitado a ORIL ningún beneficio relacionado a aumentos de precios, exenciones en el cumplimiento de regulaciones u otras concesiones especiales que redunden en afectar al consumidor o la calidad del producto.

En cambio, destacó que el estudio de calidad de la leche que midió desde el 28 de mayo hasta el 1 de julio, estableció que Tres Monjitas excedió en el cumplimiento de los estándares para producir leche Grado A y superó los días de durabilidad establecidos. Estos estándares son impuestos por regulaciones de la Administración de Drogas y Alimentos (FDA, en inglés).

El titular, quien no suministró el estudio a Primera Hora bajo el alegato de que debía hacer una consulta legal, detalló que el análisis realizado por los laboratorios de ORIL a la leche que se produjo en la planta de Hato Rey y la que está ya en los comercios mide aspectos como la grasa, proteínas, bacterias, viscosidad de la leche y acidez, entre otras cosas. Sólo estipuló que se supone que la durabilidad de la leche sea de 15 días y la de Tres Monjitas resultó que “por 20 días se mantenía dentro de todos los parámetros”.

“Lo que te quiero decir con los 20 días es que la leche dura bastante más de lo que está marcado” en la fecha de expiración sin dañarse, precisó González Beiró.

No obstante, la nutricionista Rivera destacó la importancia de que la leche se guarde en un refrigerador en el que haya una temperatura constante de menos de 40 grados Fahrenheit para evitar que se dañe antes de la fecha estipulada.

En Tres Monjitas, por ejemplo, se mantiene en toda la cadena de procesar la leche una temperatura entre 35 a 38 grados para mantener su calidad, reveló su gerente general, Orlando González.

Importancia de la leche

Rivera destacó que, por aspectos culturales, la leche fresca proveniente de la vaca es uno de los principales productos de la dieta puertorriqueña. Destacó que los boricuas reconocen la rigurosidad en la que se procesa esta leche y se sienten “seguros” al incluirla en su dieta.

“En términos nutricionales, la leche contiene macronutriente como grasas, proteínas e hidratos de carbonos, en adición, aporta con una buena fuente de micronutrientes como vitamina A y D, calcio, fósforo, potasio, magnesio. La leche, por contener varios nutrientes esenciales, contribuye a prevenir ciertas enfermedades como la osteoporosis y enfermedades relacionadas al corazón”, hizo constar la educadora del Servicio de Extensión Agrícola.

De inmediato, mostró preocupación en que se susciten problemas en la disponibilidad y accesibilidad de la leche fresca para el consumidor habitual, que por general son los niños, tras la paralización de la producción de leche fresca en Suiza Dairy.

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“El factor de la diminución en la producción en la industria lechera y donde solamente una empresa puede procesarla y distribuirla puede ponernos en una posición vulnerable. Puede no estar accesible y disponible para suplir la demanda provocando una disminución en la contribución a la diversificación en la alimentación del puertorriqueño”, dijo.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Agricultores -y quien posee una maestría en procesamiento de lácteos-, dijo estar seguro que la cadena alimenticia del boricua no se afectará por el hecho de que sólo Tres Monjitas esté a cargo de la producción de la leche fresca en el país. A su juicio, la compañía “está supliendo bien”, es una empresa de tradición boricua establecida hace más de un siglo y está inmersa en toda la cadena de producción, pues poseen vaquerías en Cayey y Cidra.

Baja en el consumo

Por otra parte, el experto mostró preocupación de que en los últimos 20 años se ha registrado una baja en el consumo de leche fresca.

Una de las causas que identificó fue la caída de la tasa de natalidad, ya que los menores y adolescentes son quienes más consumen este alimento.

Cordero señaló que las estadísticas muestran que hace 20 años en los comedores escolares se servían hasta un millón de cuartillos de leche cada 15 días y en la actualidad la necesidad se suple con unos 265,000 cuartillos.

Mientras, la compra de leche también disminuyó.

Señaló que para inicios del 2000 se vendían un millón de cuartillos diarios y ya la suma descendió a 210,000 cuartillos al día. El ganadero dijo que todos estos cambios llevaron a que en el transcurso de los pasados 20 años la producción local bajara de 350,000 millones de cuartillos al año a unos 200,000 millones al año en la actualidad.

El secretario de Agricultura apuntó también a que se ha dado un incremento en el uso de la leche UHT, aunque no pudo proveer cifras. De hecho, este tipo de leche se identifica como la primera alternativa que tendría un ciudadano si hay problemas de disponibilidad de la leche fresca.

Rivera y Cordero coincidieron que ambas leches tienen un aporte similar a la nutrición, con un promedio de entre ocho a nueve gramos de proteína y entre 290 a 300 miligramos de calcio. Destacaron que la única diferencia es el sabor. Coincidieron la UHT, que se pasteuriza a temperaturas más altas, tiene un sabor a “quemado”. Entonces, esta alternativa depende del gusto de cada consumidor.

“Es lo mismo con una zanahoria. Cuando está cruda, el sabor y textura es diferente que cuando la hierves. Cuando la hierves, la textura cambia, pero la composición nutricional sigue siendo la misma”, ejemplificó el presidente de los Agricultores.

La nutricionista, por su parte, destacó la preferencia a la leche fresca sobre la UHT, debido a la sensación que se tiene al ser un producto fresco. Dijo que “nos gusta al paladar”.

A diferencia de la leche fresca, la leche UHT no se tiene que refrigerar previo a ser abierta. Mientras, este tipo de leche tiene una fecha de uso de un año. Sin embargo, una vez se abre, requiere refrigeración.

La nutricionista también destacó que otros derivados de la leche pueden ser una opción para sustituir la leche fresca son el yogurt, bebida fermentada conocida como el kéfir, variedad de quesos, así como mantecados bajos en azúcar y grasa.

Sustitutos del calcio provisto por la leche fresca

• Tofu - ½ taza = 434 mg
• Bebida de soya - 1 taza = 299 mg
• Yogurt - 1 taza =289 mg
• Queso suizo - 1 slice =249 mg
• Rainbow Trout (Trucha) -1 filete = 123 mg
• Jugo de china con calcio añadido – 1 taza = 349 mg