Una tigresa del Zoológico del Bronx, en Nueva York, dio positivo para el para SARS-CoV-2, el nuevo coronavirus causante de la enfermedad Covid-19.

El animal, de unos cuatro años, presenta tos seca. Al parecer, adquirió el virus de un cuidador que no mostraba síntomas en ese momento. Pero este no es el único caso. Autoridades mundiales han confirmado cuadros débiles de infección en dos perros en Hong Kong y en un gato en Bélgica.

Aunque son casos aislados y muy raros, según los especialistas, cabe preguntarse si nuestras mascotas y otros animales están en riesgo.

Primeras evidencias

Una muy reciente investigación realizada en China –que todavía no ha sido impresa ni sometida a una revisión de pares– analizó cuán probable es que ciertos animales contraigan el virus y lo propaguen.

Como parte de este estudio, cinco gatos fueron expuestos a elevadas cantidades del nuevo coronavirus. Al someter a eutanasia y examinar a dos de ellos, los investigadores detectaron partículas del virus SARS-CoV-2 en sus vías respiratorias superiores. Los otros tres infectados fueron colocados en jaulas con ejemplares sanos, de los cuales solo uno adquirió el virus.

Ninguno de los animales portadores expresó síntomas y se detectó en ellos anticuerpos contra la infección. Esto podría indicar que el virus no sería altamente transmisible en gatos.

Dirigido por el virólogo Zhigao Bu, este trabajo encontró también que los hurones son susceptibles a contraer el virus. En cambio, los perros mostraron ser más resistentes. Los investigadores inocularon el coronavirus a cinco de estos animales y notaron que dos de ellos excretaban ARN viral, pero no eran portadores de la infección. Esa misma resistencia se ha observado en cerdos, pollos y patos.

De acuerdo con las primeras investigaciones, los perros serían más resistentes al nuevo coronavirus y, pese a estar contagiados, no desarrollarían Covid-19.

Juan Pablo Tirado, veterinario de la Clínica Veterinaria Docente Cayetano Heredia, señaló a El Comercio que, aunque el estudio chino parece mostrar que sí es factible el contagio en gatos y hurones, “la muy pequeña cantidad de animales observados impide tener resultados certeros y reales”. Además, explica que estos especímenes fueron expuestos a cantidades de partículas virales, tres o cuatro veces mayores que las necesarias para generar una infección en humanos.

El especialista recalca que existen cepas específicas de coronavirus que son completamente compatibles y adaptables al genoma de estas o más especies. Es por ese motivo que las mascotas son en cierto grado susceptibles al SARS-CoV-2, que al ser de la familia de los coronavirus comparte ciertas características con las otras cepas.

“Los animales pueden ser un tanto susceptibles al nuevo coronavirus, pero esto no significa que este se convierta en una pandemia en gatos o en perros, pues no es compatible del todo con estas especies”, explica el experto.

Postura actual

La Asociación Americana de Medicina Veterinaria y la Organización Mundial de Sanidad Animal sostienen que hasta la fecha no existen evidencias sostenibles de que animales de compañía se enfermen por SARS-CoV-2.

De acuerdo a los comunicados oficiales, sí es posible que ocurra un contagio en estas especies, pero no desarrollarían la enfermedad o propagarían el virus. Los expertos creen que ni los perros ni gatos se infectan fácilmente y el riesgo de transmisión hacia los humanos es mínimo.

“No hay ningún estudio de momento que diga o afirme que las personas sean potencialmente los que contagien a sus mascotas u otros animales, y que estos últimos van a tener los mismos signos clínicos que tienen los humanos con COVID-19 y la misma tasa de mortalidad”, comenta Tirado.

“Lastimosamente, todas las investigaciones actuales están dirigidas a la medicina humana. Hay algunos grupos de especialistas en medicina veterinaria que sí están haciendo sus propios estudios, pero falta todavía ahondar más”, agrega.

Por otro lado, ya son varios los laboratorios que han desarrollado pruebas de diagnósticos específicas para mascotas, pero todavía no han sido utilizadas ampliamente, según informa el portal Science. Queda claro que este es un campo que no puede ser descuidado y debería contar con más fondos de investigación.