Científicos advierten disminución en población de insectos
El problema, en ocasiones llamado el apocalipsis de los insectos, es un rompecabezas.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
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El reino de los insectos, una fauna vital para el mundo, está sufriendo “una disminución gradual en su población”, advirtieron expertos en diversos estudios publicado ayer.
El cambio climático, los insecticidas, herbicidas, la contaminación lumínica, las especies invasoras y los cambios en la agricultura y en el uso del suelo están haciendo que la Tierra pierda probablemente entre el 1% y el 2% de sus insectos cada año, dijo David Wagner, entomólogo de la Universidad de Connecticut y el autor principal de un paquete especial de 12 estudios publicados en la revista Proceedings of the National Academies of Sciences, los cuales fueron escritos por 56 científicos de diversas partes del mundo.
El problema, en ocasiones llamado el apocalipsis de los insectos, es un rompecabezas. Y los científicos señalaron que aún no tienen todas las piezas, así que tienen dificultades para comprender su enormidad y complejidad, y para conseguir que el mundo se dé cuenta y haga algo.
Wagner dijo que los científicos necesitan descifrar si la tasa de mortalidad en los insectos es mayor a la de otras especies. “Hay algo de razón para preocuparnos más”, añadió, “debido a que son el blanco de un ataque” con insecticidas, herbicidas y contaminación lumínica.
May Berenbaum, coautora y entomóloga de la Universidad de Illinois, y ganadora de la Medalla Nacional de Ciencia, dijo que “la disminución de los insectos es algo comparable a como se veía el cambio climático hace 30 años, porque los métodos para evaluar la magnitud y la tasa (de la pérdida) eran difíciles”.
Para empeorar la situación, en muchos casos, la gente detesta los insectos, a pesar de que polinizan los alimentos del mundo, son cruciales para la cadena alimentaria y se deshacen de los residuos, comentó.
Los insectos son “el tejido con el que la Madre Naturaleza y el árbol de la vida están construidos”, dijo Wagner.
Dos insectos bastante conocidos -las abejas y las mariposas monarca- son los que mejor ilustran los problemas y el descenso poblacional que estos enfrentan, agregó. Las abejas han tenido una disminución drástica en su población por enfermedades, parásitos, insecticidas, herbicidas y falta de alimento.
El clima más seco provocado por el cambio climático en el occidente de Estados Unidos significa que habrá menos algodoncillo para que las mariposas coman, señaló Wagner. Y los cambios en la agricultura estadounidense eliminan las hierbas y las flores silvestres que necesitan para el néctar.
“Estamos creando un enorme desierto biológico para la soya y el maíz en una zona gigantesca del centro norte” de Estados Unidos, puntualizó Wagner.
Los documentos científicos publicados ayer no proporcionan información nueva, aunque muestran un panorama general, pero incompleto, de un problema que empieza a atraer la atención. Los científicos han identificado un millón de especies de insectos, aunque probablemente aún deban descubrirse cuatro millones más, dijo Berenbaum.
Doug Tallamy, entomólogo de la Universidad de Delaware y quien no participó en los estudios, dijo que estos ponían de manifiesto la manera en la que el mundo ha “pasado los últimos 30 años gastando miles de millones de dólares para encontrar nuevas formas para matar insectos y meros centavos trabajando para preservarlos”.
“La buena noticia es que, salvo por el cambio climático, los individuos pueden hacer mucho para revertir la disminución de insectos”, señaló Tallamy en un correo electrónico. “Este es un problema mundial con una solución a nivel individual”.