Miami. La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, en inglés) dio a conocer este martes que contempla dos opciones para acometer la complicada y costosa tarea de transportar a la Tierra las muestras de suelo marciano recogidas por el robot Perseverance, unas de las cuales implica la asociación con socios privados.

La agencia espacial estadounidense planea escoger entre una de las dos opciones delimitadas hasta el momento a partir de la segunda mitad de 2026.

Según detalló durante una teleconferencia el administrador de la NASA, Bill Nelson, una de las opciones se sostendría en las nuevas posibilidades comerciales para llevar la carga útil del módulo de aterrizaje a la superficie de Marte e implicaría un costo que oscila entre $5,800 y $7,100 millones.

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La otra estrategia para recoger unas 30 muestras que ha recogido el Perseverance “aprovechará los diseños de sistemas de entrada, descenso y aterrizaje volados anteriormente, a saber, el método de grúa aérea, demostrado con las misiones Curiosity y Perseverance”, según la agencia espacial.

Esta opción implicaría un presupuesto entre los $6,600 y $7,700 millones, reveló Nelson, quien especificó que para proceder con el análisis de ambas “arquitecturas” requerirán que el Congreso les apruebe una partida de $300 millones para el año fiscal 2025.

Este nuevo enfoque garantiza que la NASA pueda traer las muestras de Marte con “un importante ahorro de costos” y de tiempo en comparación con el plan anterior, agregó el saliente administrador de la NASA, quien estimó que en base a cualquiera de estas dos alternativas las muestras podrían llegar al planeta entre 2035 y 2039.

“Estas muestras tienen el potencial de cambiar la forma en que entendemos a Marte, nuestro universo y, en última instancia, a nosotros mismos”, señaló Nelson.

Las muestras recogidas por el rover Perseverance, que despegó en julio de 2020 y alcanzó el Planeta Rojo el 18 de febrero de 2021, permitirán descifrar si el vecino planeta alguna vez albergó vida.

Para ambas potenciales opciones se contempla una versión más pequeña del vehículo que volará con las muestras desde Marte hasta la nave de la Agencia Espacial Europea (ESA, en inglés) que estará orbitando el planeta rojo y será responsable de transportar la carga hasta la Tierra.

Según informó hoy la agencia, los paneles solares de la plataforma de aterrizaje serán reemplazados por un sistema de energía de radioisótopos que puede proporcionar energía y calor durante la temporada de tormentas de polvo en Marte.

Nelson reveló hoy que hasta el momento no ha hablado sobre este programa con el próximo máximo responsable de la NASA, el millonario Jared Isaacman, designado por el presidente electo, Donald Trump, para dirigir a la agencia espacial estadounidense.

Agregó que le parecía “responsable” ofrecer alternativas a la Administración entrante.