Gerencia de Facebook quiere mover los salones de clases al metaverso
Nick Clegg, presidente de asuntos globales de Meta, aseguró que sería rehumanizar la educación.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 1 año.
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Madrid. El gigante tecnológico estadounidense Meta, matriz de aplicaciones como Facebook, Instagram o WhatsApp, considera que el metaverso será la próxima evolución de internet y su uso servirá para “rehumanizar” la educación, inspirar y motivar a los alumnos gracias a su capacidad de inmersión.
El metaverso “no pretende deshumanizar la educación, sino todo lo contrario. Creo que dentro de muchos años echaremos la vista atrás y diremos: ‘Dios mío, ¿te acuerdas? Solíamos sentarnos en un pupitre y mirar trozos de papel’. Eso es deshumanizador”, destacó en una entrevista con EFE por videoconferencia Nick Clegg, ex viceprimer ministro del Reino Unido y ahora presidente de asuntos globales de Meta.
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Entendido como un espacio virtual dotado de tecnologías inmersivas (como la realidad aumentada, la realidad virtual, la inteligencia artificial o la realidad mixta), el metaverso aportará “experiencias de aprendizaje mucho más humanas. Creo realmente que estamos rehumanizando la educación”, destacó.
Para poder tener la mejor experiencia en este enclave tecnológico, la firma liderada por Mark Zuckerberg cuenta con herramientas como las Meta Quest, unas gafas virtuales capaces de funcionar en realidad mixta para adentrarte en el mundo virtual y sumergirte en una experiencia creativa, educacional o de ocio.
En su apuesta, Clegg considera que esta revolución tecnológica aplicada a la educación no implicará “reemplazar a los profesores, sino darles nuevas herramientas para inspirar y motivar a los jóvenes estudiantes”, detalló.
Salones virtuales
Se trata de una nueva forma de replantear las clases, al crear un entorno virtual que reúne a profesores y alumnos: “El profesor toma por completo el control de la experiencia que tienen los estudiantes. Y es por eso por lo que los desarrolladores de programas están creando una gran cantidad de contenido. Aunque nos encontramos solo en el arranque”, precisó.
Según un estudio realizado por la auditora PriceWaterhouseCoopers (PWC), el 40% de los estudiantes que usan tecnología de realidad virtual en sus clases se consideran más preparados para aplicar en la vida real lo aprendido y participan un 150% más que en las clases tradicionales.
Aumenta, además, la eficiencia en el aprendizaje al ser capaz de reducir a tan solo 29 minutos asimilar conceptos, lejos de las 2 horas de la enseñanza tradicional en un aula o los 45 minutos que llevaría en el aprendizaje online, según el estudio.
“Estamos en una fase muy temprana. Todavía necesitamos un ecosistema mucho más rico de programas para los profesores. Nosotros podemos construir el hardware, somos una empresa tecnológica, pero no podemos hacer las clases de geometría o de álgebra. Se trata de una alianza. Queremos trabajar con los profesores, los gobiernos y los investigadores para hacer de esto una realidad”, detalló Clegg.
En este sentido, la multinacional ya ha anunciado proyectos en centros educativos de países como Japón, Reino Unido o en diversos estados europeos de cara a profundizar en su potencial para el aprendizaje y para analizar las transformaciones necesarias en el entorno educativo que permitan la integración de esta nueva tecnología.
Proyectos que también miran a Latinoamérica, “una región que adopta muy rápido las nuevas tecnologías. Hogar de una comunidad de creadores muy dinámica con más de 100 millones de cuentas para el uso de la realidad aumentada en Facebook e Instagram y con grandes mercados como Brasil y México entre los 10 primeros a nivel mundial”, apuntó el ex viceprimer ministro británico.
Para ello, destacó los cuatro pilares de la transformación tecnológica propuesta por Meta: “Reinventar las clases en el colegio, situar en un espacio virtual a profesores y alumnos, transformar la formación profesional y que sea un aprendizaje para toda la vida”.
Un proceso para el que no se marcan un plazo. “Esta transformación ya está ocurriendo y vemos su gran potencial. Esperamos que pasen algunos años antes de verlo a gran escala, pero a veces la tecnología va lenta y de repente se dispara su masa crítica. Y no puedo predecir cuándo será eso”, concluyó.