El embarazo de una joven africana de 154 años se ha convertido en uno de los casos más asombrosos de la medicina, luego que científicos que estudiaron su caso determinaran que quedó embarazada tras sostener sexo oral, según reseñó la publicación colombiana Diario ADN.

La publicación explicó que según el medio británico ‘The Sun’, la joven nació sin una apertura vaginal, quedando embarazada por un método que, hasta ese momento, era improbable.

Los hechos se remontan al 1988, cuando la adolescente fue ingresada en un hospital tras experimentar un dolor intenso en el abdomen. Los exámenes médicos concluyeron que la joven estaba embarazada y en labores de parto. Pero para sorpresa, los especialistas encontraron que el embarazo de la joven era imposible ya que padecía de atresia vaginal, condición que le impedía mantener relaciones sexuales vaginales o dar a luz de una forma común.

La única forma probable para la ciencia explicar este embarazo, era que la fémina se hubiese sometido a terapias de reproducción asistida, como la fertilización in vitro, lo que la joven rechazó. De hecho, fue necesario practicarle una cesárea ya que debido a la condición, la joven tampoco podía tener un parto natural, procedimiento mediante el que trajo al mundo un niño de 6.2 libras.

El caso fue publicado en el ‘British Journal Of Obstetrics & Gynaecology’, describiendo que la carencia de una abertura vaginal es un extraño fenómeno que afecta entre 4,000 a 10,000 niñas recién nacidas en el mundo.

¿Cómo fue que sucedió?

Tras examinar el historial sexual de la joven, los especialistas anonadados por lo sucedido llegaron a la conclusión de que la joven quedó embarazada mediante el sexo oral.

Estos encontraron que meses antes del parto, la niña fue atendida en una clínica tras recibir una puñalada en el abdomen. Según relató la joven a la enfermera, su novio la apuñaló tras descubrirla realizándole sexo oral a otro hombre.

Los especialistas especularon que, de alguna extraña manera, tras el sexo oral, el esperma llegó a sus órganos reproductivos, embarazándola y que probablemente la puñalada ayudó al suceso.

“El hecho de que el hijo se pareciera al padre excluía la posibilidad de una concepción aún más milagrosa”, añade el artículo.

Los detractores de la teoría afirman que los ácidos estomacales son suficientemente fuertes como para haber matado el esperma. Sin embargo, los científicos sostienen que la explicación más lógica es que probablemente, al momento del suceso, la niña no tenía comida en el estómago, por lo que el contenido de los ácidos en el estómago era poco, lo que permitió que los espermatozoides sobrevivieran y completaran el recorrido hasta el útero.

La joven sostuvo que a pesar de los cambios en su cuerpo, nunca pensó que podría quedar embarazada por su incapacidad de sostener relaciones vaginales.