Una criatura del tamaño de un cuervo que vivió hace unos 150 millones de años ha vuelto al lugar que le corresponde.

La calificación del Archaeopteryx como el ave más antigua conocida había sido puesta en duda hace dos años por científicos chinos, quienes propusieron retirar la criatura prehistórica de la rama aviaria del árbol evolutivo para acercarla a la de dinosaurios con forma de aves.

Pero ahora un equipo internacional dirigido por el Instituto Belga de Ciencias Naturales cree que el Archaeopteryx debería ser considerado ave.

El famoso fósil fue descubierto en 1861 en Alemania y se convirtió rápidamente en un icono de la evolución. El Archaeopteryx posee características de ave y de reptil. Tiene alas y plumas como un ave, pero también garras de tres dedos, colmillos y una cola ósea similar a la de un dinosaurio.

Los descubrimientos de dinosaurios emplumados en el noreste de China en las dos últimas décadas habían puesto en duda el sitio del Archaeopteryx en la evolución de las aves.

Las evidencias más recientes según las cuales el Archaeopteryx tenía más en común con las aves que con los dinosaurios provienen del descubrimiento del esqueleto intacto de un dinosaurio desconocido hasta ahora al que se denominó Aurornis xui. Vivió durante la era media a tardía del Jurásico en la provincia china de Liaoning.

El investigador belga Pascal Godefroit y su equipo compararon la anatomía del fósil dinosaurio recientemente descubierto con una variedad de aves y dinosaurios para determinar su relación. El análisis, publicado en la edición del jueves de la revista Nature, vuelve a clasificar el Archaeopteryx entre las aves.

Lawrence Witmer, un experto en evolución aviaria en la Universidad de Ohio que no participó en el estudio, consideró convincente el análisis, aunque advirtió que "todas esas especies emplumadas eran muy similares".