Te enamoraste de alguien encantador y se hizo tu pareja. Sin embargo, con el transcurrir del tiempo las peleas y las dudas te asaltan: ¿será para mí?

¿Qué ocurre cuando tú y tu pareja unen sus vidas y no trabajan en un mismo sentido? Pasa que deben separar sus caminos por el bien de ambos.

Descubre si tú y tu actual pareja están hechos el uno para el otro:

-Pelean muchas veces, hasta en público. No tienen reparos en discutir en cualquier ambiente y que los demás se enteren de sus problemas.

-Pasan tiempo en silencio porque no tienen tema de conversación. Si no tienen cosas en común, es probable que se pierda el interés de uno del otro. 

-Se estresan con facilidad y pelean. Cuando te das cuenta de que un problema fácilmente solucionable es mucho más grande cuando él o ella está contigo, ¡ojo!

-Sus amigos no son tus amigos. Te aburres en sus reuniones y viceversa. Nadie te dice que debes ser amiga o amigo íntimo de sus amigos, pero sí llevarte bien con ellos por lo menos.

-Sus gustos son muy diferentes. De repente a ti te gustaría pasar tus vacaciones en la playa y a tu pareja, escalando los Andes. Recuerda que con el diálogo pueden llegar a acuerdos intermedios.

-No está a tu lado en los momentos difíciles. Eso implica una falta de compromiso y solidaridad de su parte.

-Cuando están juntos muchas veces cada uno está sumergido en su celular. Lo mejor de pasar tiempo juntos es tener un momento para dialogar cara a cara y no con los amigos a través del teléfono. 

-Dudas todo el tiempo si te está engañando. La desconfianza es una señal de que las cosas no están funcionando bien.

-Evitas decirle toda la verdad para no discutir. Recuerda que la falta de diálogo puede traer consecuencias a futuro.

-Comen muy diferente. Sus dietas son muy diferentes, de repente tú eres amante de la carne y tu pareja, es vegetariana. Eso puede ser un motivo constante de discusiones.