Febrero es el mes en el que el amor se roba los titulares y nos inunda de corazones rojos, flores, romance, pasión, declaraciones y gestos grandiosos. Un mes amado por muchos, pero también difícil para otros, pues puede crear falsas expectativas en las relaciones o hacer que quienes están solteros se sientan incompletos o fuera de lugar. No hay nada de malo en celebrar el amor a lo grande, pero es importante recordar que no debe limitarse a un solo día ni depender de grandes gestos, el amor debe ser celebrado y disfrutado en todas sus formas, todos los días

Además, ¿qué pasa con el amor más importante de todos? Ese que no se construye con flores, ni chocolates, sino con pequeñas y grandes decisiones y aceptaciones diarias que nos recuerdan que somos nuestra prioridad; el amor propio.

Seguramente lo has escuchado muchas veces ya, pues todos hablan de su importancia, pero, ¿cómo exactamente lo logramos? Lo primero que debes saber es que el amor propio no es un destino al que llegamos cuando alcanzamos cierta meta, peso o éxito. El amor propio es un proceso de aceptación que se logra mediante un compromiso constante con nosotras mismas. Un día podemos sentirnos imparables y al siguiente como si el mundo nos pasara por encima. Y eso está bien, ¡es normal! Lo importante es entender que el amor propio es un trabajo diario, una elección consciente de tratarnos con amabilidad, aceptarnos tal cual, escucharnos, priorizarnos y atender nuestras necesidades.

Pero Layla, y ¿qué tiene que ver el amor propio con la sexualidad?, te preguntarás. Mucho más de lo que imaginas.

El amor propio es la base para una sexualidad plena. Cuando nos queremos y nos aceptamos conectamos mejor con nuestro cuerpo, nuestros deseos, nuestras emociones y placeres. La sexualidad no es solo lo que ocurre entre las sábanas, es la manera en que experimentamos el placer en todas sus formas, desde el simple acto de disfrutar una ducha caliente hasta la intimidad con una pareja. Investigaciones han demostrado que una buena autoestima está directamente relacionada con una vida sexual más placentera. Un estudio publicado en el Journal of Sex Research encontró que las personas con mayor amor propio tienden a disfrutar más de sus experiencias sexuales.

Amarnos también significa no conformarnos con menos de lo que merecemos y establecer límites sanos. Por otro lado, debemos entender que el placer no es un premio, sino un derecho. Y esto aplica para el disfrute a solas y en pareja. Masturbarse, por ejemplo, no solo es una forma de autoconocimiento, sino un acto de amor propio es permitirse sentir, explorar y descubrir lo que nos gusta sin culpa ni vergüenza.

El amor propio no siempre se trata de grandes gestos o transformaciones drásticas. A veces es tan simple como tomarnos cinco minutos extras en la cama antes de empezar el día, hacer una pausa para saborearte el café en silencio antes de ser arrastrados por el caos de la rutina o deleitar una copa mientras disfrutas tu skincare o serie favorita. Estos pequeños momentos son esenciales para nuestra salud mental y bienestar. Nos permiten reconectar con nosotras mismas y, en consecuencia, con nuestra sexualidad. No podemos esperar sentirnos plenas en la intimidad si pasamos el día desconectadas de nuestro cuerpo y nuestras emociones.

Algunas prácticas que pueden ayudarnos a fortalecer nuestro amor propio y mejorar nuestra conexión con nuestra sexualidad incluyen:

  • Escuchar a nuestro cuerpo: Darnos permiso para descansar cuando lo necesitamos, movernos de manera placentera y alimentarnos con consciencia. A veces es necesario desconectarnos de todo es la mejor manera para volver a conectar con nosotros mismos.
  • Háblate con amor: El diálogo interno tiene un impacto enorme en cómo nos percibimos. En lugar de castigarnos por lo que no hemos hecho o logrado, celebremos cada pequeño avance. ¿Por qué le hablas bonito a un particular y eres muy cruel contigo?
  • Placer sin culpa: Ya sea a través de un masaje, un baño relajante, disfrutar un café en una taza bonita, comerte un dulce o explorando tu sensualidad, recuerda el placer es parte de una vida plena.

Cuando hablamos de amor propio, muchas veces nos enfocamos en las mujeres, pero los hombres también lo necesitan. Crecemos en una sociedad que les enseña a los hombres a reprimir sus emociones, a medir su valor por su desempeño, capacidad de proveer y a desconectarse de su lado más sensible. Sin embargo, un hombre que se ama y se respeta también es un mejor amante, un mejor compañero y un ser humano más pleno.

El amor propio en los hombres implica permitirse sentir, aceptar sus vulnerabilidades y conectar con su lado más sensible, permitirse expresar y recibir cariño y disfrutar del placer sin presiones ni expectativas. Un estudio de la Universidad de Toronto encontró que los hombres con mayor autoestima y autoconocimiento reportan relaciones más satisfactorias y mayor confianza en su desempeño sexual. Esto demuestra que el amor propio es una herramienta poderosa para el bienestar de todos, sin importar el género.

El amor propio no es un lujo, es una necesidad. Es la base sobre la cual construimos nuestra relación con el placer, la intimidad y los demás. No es un proceso lineal, ni un destino final. Es un camino que elegimos recorrer cada día, con sus altas y sus bajas, pero siempre con la certeza de que merecemos lo mejor.

Así que este febrero, más allá de celebrar el amor en pareja, hazte un regalo a ti misma o a ti mismo: elige amarte. En las pequeñas acciones, en los momentos de autocuidado, en la forma en que te hablas y te permites sentir placer. Porque al final del día, el amor más importante es el que te das a ti, pues ¡tú eres el amor de tu vida!

(Este artículo es solo para fines informativos y no debe tomarse como asesoramiento médico ni reemplazo terapéutico. Si deseas aprender más sobre cómo conectar con tu placer de forma consciente, tienes preguntas o inquietudes específicas sobre tu bienestar sexual, te recomiendo consultar con un profesional de la salud. Para una atención personalizada te invito a agendar una consulta sexológica conmigo. No olvides seguirme en las redes para más contenido @LaylaMParty)