Conectarse demasiado a Facebook puede causar problemas de pareja
Según un estudio, las parejas que llevan menos de tres años unidas son las más vulnerables
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 11 años.
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Cuando se unieron, pensaron que su relación sería de dos, entonces, Facebook la convirtió en una de tres. Es que dicha red social ha permitido que viejos “fantasmas” del pasado reaparezcan para desempolvar nostálgicos recuerdos de amores que murieron y que amenazan con asesinar relaciones del presente. Otros se han enviciado a tal punto que pasan más tiempo navegando en dicha red social que compartiendo con sus parejas.
Estos son algunos de los hallazgos de un estudio de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Misuri. En el mismo se encontró que el uso excesivo de Facebook está relacionado con conflictos de pareja y que, incluso, puede provocar infidelidad física o emocional, rupturas y hasta el divorcio, especialmente en parejas que se encuentran en los primeros tres años de su relación.
La doctora Amelia Rodríguez, psicóloga clínica y perita forense, comentó que el último aspecto “se atribuye a que al inicio de la relación, la intimidad y el compromiso se encuentran en desarrollo. Por esto existe más posibilidad de que alguna de las partes o ambas centren su atención en factores externos que permitan alivianar la ansiedad que pudieran surgir en las dinámicas de pareja”, advirtió la doctora. Por otro lado, expuso que la experiencia de su práctica le indica que los problemas con la red social también pueden surgir en parejas que llevan muchos años unidas.
Por su parte, la doctora Kevia Calderón –psicóloga clínica también– indicó que el estudio es una muestra sobre las problemáticas que pueden enfrentar las parejas cuando permiten que elementos externos a su relación ocupen un espacio primordial, restando tiempo al diálogo y a la convivencia apropiada.
“En este caso, se le ha llamado Facebook, pero en realidad pudiera ser cualquier otra actividad cuyo atractivo seduzca tanto a una o ambas partes de la pareja, al punto de llegar a distanciarse afectiva y físicamente”, manifestó. “Este distanciamiento, posteriormente, pudiera traducirse en malos entendidos, celos, sentimientos de abandono, desinterés por la relación y atracción por nuevas relaciones”, añadió la doctora Calderón.
La doctora Rodríguez expuso que las redes sociales permiten que sus usuarios tengan mayor acceso a personas del pasado y también facilita establecer nuevas relaciones. “Esto es posible no solo por la disponibilidad de la información, sino porque incluso personas que pudieran ser tímidas pueden manejar mejor las dinámicas sociales dado que no hay una interacción cara a cara”, aseguró la experta en salud mental.
¿Tanto poder?
La doctora Rodríguez aclaró que muchas veces “se le atribuye a Facebook la responsabilidad del deterioro entre las parejas, sin embargo, este no tiene vida propia más allá de la que los usuarios le dan”. También señaló que existen personas que hacen un uso más cuidadoso de la red social y, por ello, sus dinámicas y estabilidad de pareja no son afectadas.
Es muy tentador, indica la doctora Calderón, echarle la culpa a Facebook o a cualquier otra red social por una ruptura amorosa. “Realmente, la relación la rompe la persona, quien con su conducta da paso a situaciones conflictivas que, de no ponerles un alto o ser manejadas apropiadamente, pudieran generar heridas muy profundas y rupturas irreconciliables”, opinó.
La doctora Rodríguez aseguró que desde hace varios años se ha observado un aumento en las dificultades de parejas y en las separaciones relacionadas con el uso desmedido de las redes sociales. “Es un fenómeno que se presenta en distintos países y es muy común en Puerto Rico. En nuestra práctica clínica, aproximadamente un 50 por ciento de las parejas se han visto afectadas por conflictos relacionados al uso de las redes sociales”, concluyó.
Quejas frecuentes
Tiempo de conexión
Algunas personas se quejan del exceso de tiempo que pasan sus parejas “conectadas”, particularmente a Facebook, lo que repercute en el descuido de las tareas del hogar y compartir con la pareja.
Reencuentro con viejos amores
Se presenta con frecuencia que una de las partes se ha encontrado con una ex pareja a través de estas redes y, entonces, se desarrollan conversaciones y acciones que van subiendo de intensidad e intimidad a espaldas de su compañero.
Dinámicas de coqueteo
Son muchas las quejas sobre que una de las partes usa estos medios como una forma de conocer nuevas personas o de establecer relaciones paralelas con “amigos”.
Atentado contra la privacidad
Con regularidad, se presentan discusiones entre las partes por la solicitud de la contraseña para acceder a la cuenta de su pareja, así como la incomodidad de que la otra parte entre a su cuenta para ver el movimiento que tiene dentro de la red.
Exposición de información inadecuada
Se han presentado quejas sobre fotos colocadas (provocativas e insinuantes o con una compañía inadecuada). Otras tantas hacen referencia al estatus, que en ocasiones cambia luego de una discusión.
Recomendaciones
Las doctoras Amelia Rodríguez y Kevia Calderón ofrecen algunas recomendaciones para que tu pareja y tú lleven la fiesta en paz.
Distribuye bien tu tiempo. Evalúa el tiempo que dedicas a cada una de las actividades de tu día. Analiza el tiempo que dedicas a compartir y a dialogar con tu pareja.
Moderación. Limita el tiempo que emplearás en acceder a las redes sociales.
Evaluación psicológica. Si te resulta difícil enfocarte en otras tareas y presentas dificultades en tu trabajo, estudios, y relaciones sociales por tu necesidad de entrar a Facebook, existe la posibilidad de que estés desarrollando una adicción. En cuyo caso, debes someterte a una evaluación psicológica.
Comunicación. Cuando los mecanismos de comunicación son efectivos y la frecuencia de los diálogos recurrentes, se observa menos necesidad de acudir a las redes sociales.
Tiempo de calidad. Procura pasar tiempo de calidad con tu pareja. No solo se trata de salidas especiales, también pueden disfrutar de realizar juntos las tareas del hogar, dialogar en la cena y ver un programa en la televisión que ambos disfruten.