Desde los años 70 ha mejorado tanto la vida sexual de las personas mayores que, según una investigación, seis de cada 10 mujeres y siete de cada 10 hombres mayores de 70 años están a gusto con sus asuntos eróticos.

Según la tesis doctoral de Nils Beckman, de la Univesidad de Gotenburgo, en Suecia, la actividad sexual de ese segmento de la población ha aumentado significativamente tanto para los varones como las mujeres.

Con una base de datos de diferentes estudios, los investigadores examinaron las actitudes hacia el sexo de las personas de la tercera edad e identificaron los factores que determinan si están sexualmente activas o no.

Encontraron, por ejemplo, que las experiencias de la niñez influyen en la sexualidad aun cuando ya se está en la etapa de “senior citizen”. 

Una infancia en pobreza, el divorcio de los padres y el castigo con golpes pueden reducir el deseo y la actividad sexual en la edad madura.

Los roles estereotipadamente asignados a hombres y mujeres también influyen en cuánta actividad sexual hay en la vida de una persona de la edad dorada. Ellas, por ejemplo, probablemente estén menos activas si su pareja varón no experimenta mucho deseo.

“En otras palabras, nuestros estudios sugieren que el deseo que experimenten las mujeres no es determinante en cuán activas estén”, afirmó Beckman. “Una razón puede ser por los roles con los que crecieron, que dictan que los hombres siempre toman la iniciativa”.

Aun así, desde los 70 la actividad sexual en las mujeres ha aumentado de un 12 por ciento a un 34 por ciento; en los hombres se ha incrementado de un 47 a un 66 por ciento.

“Los estudios encontraron que, incluso las personas en sus 90 tienen sentimientos sexuales. Aunque poco probable que estén activas a esa edad, hablan de sus pensamientos y sueños sexuales”, añadió Beckman, según reseñado en el portal noticioso de la Universidad.