Por las ansias y emoción que produce tener mucho tiempo libre, es fácil imaginar una larga lista de todo lo que queremos hacer durante nuestras vacaciones.

Aquellos afortunados que tienen un mes completo, al principio visualizan todo el tiempo que tendrán en cuatro semanas. Si n embargo, ese tiempo pasa volando y si no se organiza, es probable que no lleguemos ni a la mitad de lo que quisiéramos hacer.

Rysobel Rivera, coach en liderazgo, motivación y cambio de energía, hace hincapié en la importancia de trazarse metas reales para poder cumplirlas. 

“Deben tener metas reales. Establecer si durante el mes van a tomar vacaciones locales o irse de viaje, tomando en cuenta la cantidad de miembros de la familia, intereses particulares de ellos, o necesidades especiales. Por otra parte, deben establecer si van a desarrollar proyectos en el hogar, como organizar espacios, hacer remodelaciones o hacer cambios en la estructura interna del hogar”, dijo la experta. 

De esa manera, se tendrá más claro el tiempo que habrá disponible para ocio y tareas.

Rysobel recomienda establecer rutinas, teniendo en cuenta que para los niños el verano es tiempo de diversión y descanso de la estructurada vida escolar.

En ese aspecto, y tomando en cuenta lo visuales que son los chicos de hoy, la coach recomienda integrar en la casa figuras decorativas alusivas al verano, ya sea con figuras de animales o cualquier tipo de ornamentación de la época. De este modo el ambiente para ellos será distinto y motivador. Para desarrollar la rutina, que tiene como fin poder cumplir con todas las tareas que se quieren realizar, la familia debe establecer si los días que quieren pasear van a ser durante los fines de semana o en día de semana.

“Hay muchas personas que prefieren hacerlo durante los días de semana porque tiene sus ventajas. Los lugares están menos llenos, hay más estacionamiento y a veces las entradas son más baratas. Pero tienen que verificar que los sitios estén abiertos, porque algunos cierran en días de semana, así que verificando no pierdan tiempo ni gasolina”, dijo.

Al decidir ese aspecto se pueden dedicar cuatro días de la semana a los proyectos del hogar, y tres a pasear o viceversa.

Para poder aprovechar lo más posible lo mejor es tener claro con anticipación lo que se quiere hacer.

“El día tenemos que organizarlo de antemano. Es importante que los niños también estén ocupados, divirtiéndose, para que los padres puedan maximizar el tiempo que tienen para hacer las tareas”, destacó.

En ese sentido, Rysobel recomienda que se identifique un área del hogar para poner allí un cajón a los niños lleno de materiales con los que puedan pintar y hacer otro tipo de manualidades. También se les pueden dejar accesibles otros tipos de juegos con los que puedan entretenerse, en lo que los padres recogen.

La experta también destaca la importancia de que los niños tengan actividad física durante el día, de modo que se puede designar una hora en específico para llevarlos a un parque.

Incluso, esos lugares y ratos al aire libre pueden convertirse en los escenarios perfectos para hacer trabajo escolar o reforzar destrezas que se quieren practicar en el verano.

“Hay muchos colegios que dejan lecturas en el verano, así que los parques y otros lugares se pueden usar para leer esos cuentos y presentárselos a los niños de manera divertida”, señaló.

En el caso de los padres, y para que puedan lograr sus metas, la experta recomienda que primero que todo establezcan lo que quieren hacer en el hogar.

 “Hay que identificar el proyecto y se debe anotar todo lo que se necesita. Porque, por ejemplo, si se quiere hacer más espacio en un clóset y se van a necesitar más tablillas, ganchos o cualquier otro elemento, se debe determinar primero, para comprarlo antes de comenzar a trabajar. Porque sucede que a veces se empieza el proyecto y no se tiene lo necesario y se pierde tiempo porque hay que salir a la tienda a comprar”, dijo la coach.

Una cosa a la vez

Otra cosa que suele ocurrir es que con el interés de hacer mucho se empiezan varias tareas a la vez y luego no se termina ninguna. Por eso, Rysobel recomienda que se elija una y se continúe con ella hasta terminarla.

“Se debe elegir un armario o cuarto por día. Entonces así se sabe que al siguiente día se va a seguir con el próximo cuarto o un mueble que hay que organizar para hacer más espacio. También es importante determinar en dónde vamos a ubicar lo que vamos sacando que ya no nos sirve y vamos a regalar. Muchas veces un proyecto de organización termina de desorganización porque ponemos lo que sacamos en los pasillos y la casa termina más desorganizada”, indicó.

Por último y no menos importante, Rysobel indica que para mantener la armonía en el hogar es que todas las decisiones que se tomen, deben considerar a todos los miembros de la familia por igual.

“Siempre digo que esto tenemos que hacerlo como trabajo en equipo. Todos convivimos bajo el mismo techo y tenemos que seguir las mismas reglas, y por consiguiente tenemos que compartir nuestro tiempo. Tenemos que tratar de complacer a cada uno de los integrantes del grupo, para que cada cual esté feliz al máximo. No podemos perder de perspectiva que es verano, que todos lo queremos disfrutar, sacar lo mejor de cada espacio y tiempo”, desctacó.

Sin escape del “back to school”

Una de las tareas que inevitablemente le tocará hacer a las familias durante las vacaciones, son las compras del regreso a la escuela.

La coach Rysobel Rivera advierte que hay que mentalizarse de que no se podrán hacer en solo un día, pues son varias las tiendas que hay que visitar para poder comprar todo lo necesario.

La experta también destaca las ventajas del Internet, pues cada vez son más los sitios que facilitan conseguir las cosas a través de este medio y, en ocasiones, hasta más baratas.

“Cuando es la parte de compra de uniformes, zapatos, loncheras y bultos, siempre le digo a los padres que integren a los niños, porque muchas veces por agilizar las cosas los padres compran las cosas a su gusto y después al niño no le gusta y hay que volver a la tienda a cambiarlo”, explicó.

 A la hora de ir a las tiendas, Rysobel recomendó organizarse según la lista de materiales y se puede dividir en dos días según la cercanía de los lugares.

“Para disfrutar del proceso y que no sea una tortura tratemos, porque lógicamente cada familia maneja su presupuesto, de no dejarlo para lo último. Eso sería lo ideal. Podemos empezar haciendo compras por Internet y así adelantar un gran paso. También siempre aconsejo que para los de los uniformes lleven a los niños, porque pensamos que tal talla le sirve, y se lo compramos en junio y ya la primera semana de agosto le queda más justo. No es lo mismo tener a un representante de la tienda que haga la recomendación según su experiencia”, dijo.