Todo este tiempo hemos vivido engañados: una piel bronceada no es sinónimo de buena salud. Todo lo contrario, es sinónimo de que la piel ha sufrido daños. Resulta que cuando los rayos del sol penetran las capas de la piel se activa la melanina y sale a flote un colorcito más intenso. Pero, las autoridades están tratando de educar para que la gente entienda que esa melanina es el mecanismo de autodefensa del cuerpo y un síntoma de que las células de la piel recibieron daño de los rayos ultravioleta.

El problema está en que mucha exposición al sol, puede provocar cáncer de piel, que es el más letal o el de mayor incidencia de muertes, advirtió el Centro para el Control de Enfermedades (CDC, por sus silgas en inglés).

Y como ahora, en el periodo de vacaciones, hay más niños en campamentos y personas en actividades al aire libre es importante tomar precauciones.

Según la agencia federal con base en Atlanta, para reducir tu riesgo de desarrollar este tipo de cáncer es fundamental proteger tu piel de los rayos del sol y en especial, evitar los salones de bronceado.

A continuación los consejos para disfrutar al aire libre y reducir el nivel de exposición al sol:

· Busca la sombra, especialmente en las horas alrededor del mediodía que es cuando los rayos solares están más intensos.

· Cúbrete con ropa para disminuir la piel expuesta a la luz solar.

· Usa sombrero preferiblemente con ala ancha que aporte sombra a tu cara , cabeza, orejas y cuello.

· Usa gafas que sean encubridoras y asegúrate de que sus cristales bloqueen el 100% de los rayos ultravioleta tanto los UVA, como los UVB.

· Ponte bloqueador solar que especifique protección amplia y cuyo factor de protección sea de 15 o más.

· Recuerda reaplicar el bloqueador solar al menos cada dos horas. También debes reaplicarlo luego de nadar, sudar o al pasarte la toalla.

Otros datos:

Cuando uno la está pasando bien al aire libre es fácil olvidar lo importante de protegerse del sol. Sin embargo, tienes que saber que la piel sin proteger se puede dañar en tan solo 15 minutos.

Toma cerca de 12 horas ver el efecto total en la piel de la exposición al sol. Por lo tanto, quizás no te das cuenta de que ya estás quemadito o abusaste y sigues aguantando sol, lo que puede ser bien dañino.

Si vas a estar al aire libre y está nublado, como quiera necesitas protección solar porque los rayos ultravioleta traspasan las nubes y son esos los que causan daño.

La piel bronceada es piel dañada. Cualquier cambio en el color de tu piel luego de un tiempo afuera, sea por quemaduras de sol o porque tu piel está bronceada es indicativo del daño provocado por los rayos solares que a la larga contribuyen además al envejecimiento de la piel y a las manchas.

Cualquiera puede desarrollar cáncer en la piel, pero estas son las personas que están en mayor riesgo:

- Los de pieles más claras

- Los que tienen historial familiar de cáncer

- Los que están en exposición prolongada a los rayos del sol por trabajo o diversión

- Los que tienen historial de quemaduras de sol, especialmente en edades tempranas

- Los que hacen mucho uso de camas de bronceado en interiores

- Los que tienen pecas

- Los que tienen piel sensible que se enrojece fácilmente

- Los de ojos azules o verdes

- Los de cabello rubio o rojo

- Los que tienen muchos lunares o de cierto tipo en particular

¡Así que a protegerse!