Mucho cuidado con las cirugías de cambio de color de los ojos
Expertos aseguran que estos procedimientos estéticos pueden conllevar riesgos graves a la salud visual.
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El mundo de la música se topó con una inesperada noticia tras el rapero cubano Osmani García “La Voz” revelar ante sus más de 7 millones de seguidores en Instagram que se cambió sus ojos color marrón a “azul claro Tokio”.
El intérprete de “Chi Chi Bon Bon” aseguró estar “sumamente feliz” tras someterse a una queratopigmentación (o KP, por sus siglas en inglés), un procedimiento que se popularizó a principios de año donde el paciente se tatúa la córnea del ojo con un láser de ultraprecisión, en el Eyes Color Lab, en la ciudad de Miami, Florida.
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Incluso, el doctor de Eyes Color Lab, Jorge César Bruno, un oftalmólogo certificado y miembro de la Academia Estadounidense de Oftalmología, explicó que la cirugía no afecta la visión y que, antes de realizarlo, lleva a cabo un estudio completo del paciente.
Sin embargo, ¿qué realmente dicen los expertos sobre la queratopigmentación? ¿Cuánto cuesta la operación? ¿Qué se recomienda para evitar contratiempos? Primera Hora te comparte unos datos importantes sobre estas intervenciones quirúrgicas.
Lanzan advertencia
La Academia Estadounidense de Oftalmología (AAO, por sus siglas en inglés) emitió a finales de enero una advertencia sobre dos cirugías de cambios de color de ojo que comenzaron a volverse popular en las redes sociales: la queratopigmentación y los trasplantes de iris.
Según la asociación más grande de médicos y cirujanos oculares a nivel mundial, con más de 32,000 integrantes, la queratopigmentación, o tatuaje ocular, consiste en usar una aguja o un láser para crear un espacio en la propia córnea, en el que se inyecta un pigmento de color, cambiando permanentemente la córnea de transparente a opaca y cubriendo el color natural del iris en su interior.
No obstante, la organización asegura que la cirugía puede conllevar posibles riesgos al no realizarse adecuadamente, como daños en la córnea, que pueden provocar opacidad, deformación, pérdida de líquido y pérdida de visión; sensibilidad a la luz; reacción al tinte, que puede causar inflamación, uveítis o crecimiento de vasos sanguíneos en la córnea; infección bacteriana o fúngica, que puede producir cicatrices en la córnea y pérdida de visión; distribución irregular del tinte; fugas del tinte en el ojo, y hasta desvanecimiento del color debido a que el tinte se desplaza o se filtra en el órgano.
Por otro lado, la AAO informó que los trasplantes de iris, por otro lado, tienen la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, pero es solo para pacientes que no tengan el órgano que le da color al ojo, o no cuente con alguna parte del mismo debido a una lesión o un defecto congénito.
“No crea que estas intervenciones quirúrgicas no conllevan riesgos” , afirmó JoAnn A. Giaconi, portavoz clínica de la AAO, en declaraciones escritas para ese entonces. ”Ninguna cirugía está exenta de peligro. Con cirugías puramente cosméticas en el ojo, simplemente no vale la pena el riesgo cuando se trata de su buena visión”, destacó.
Procedimiento costoso
Si desea cambiar el color de sus ojos, tendrá que soltar mucho billete.
Según la página VeryWell Health, el precio de la queratopigmentación siempre dependerá del proveedor del paciente y el tipo de equipo que se utilice para realizar el procedimiento, como las gotas oftálmicas anestésicas, el arnés, la pinza y la máquina láser.
No obstante, este portal asegura que los costos de la cirugía, que solo dura unos 20 minutos, puede empezar desde los $10,000 para ambos ojos.
Use lentes de contacto
La AAO sostuvo que la mejor manera para jugar con el color de sus ojos y evitar papelones, tanto a corto y largo plazo, sería asistiendo a su profesional ocular de preferencia y preguntar si eres candidato para usar lentes de contacto prescritos.
Según VeryWell Health, algunas opciones viables pueden ser los lentes opacos, que se catalogan como la mejor opción para pacientes con ojos oscuros que busquen un tono más claro; los lentes de aumento, que son completamente transparente y ayudan a resaltar el color natural del iris; y los lentes de visibilidad, que tienen flecos de azul claro o verde que acentúan el iris, añadiéndole más vida.