La variante Ómicron del COVID-19 se está extendiendo con rapidez por todo el mundo y se espera que prontamente sea la dominante en la mayoría de los países.

Aunque hasta este momento no está claro entre la comunidad científica cuán grave podría ser esta variante, hasta ahora los síntomas entre los contagiados han sido leves.

Sin embargo, expertos advierten que la Ómicron pudiera ser mucho más contagiosa que la Delta.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) los síntomas más frecuentes entre los pacientes contagiados con Ómicron son:

-Tos

-Fatiga

-Congestión o secreción nasal

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la variante Ómicron del coronavirus ha sido detectada en 89 países, y los casos de COVID-19 relacionados con esta mutación se están duplicando entre 1.5 y tres días en lugares con contagios comunitarios y no solamente por infecciones adquiridas en el extranjero.

La “ventaja sustancial de crecimiento” de ómicron sobre la variante delta significa que es probable que pronto supere a la delta como la forma dominante del virus en países donde la nueva variante se está propagando localmente, agregó la agencia de salud de la ONU.

La OMS señaló que la variante ómicron se está propagando rápidamente incluso en países con tasas altas de vacunación o donde una proporción significativa de la población se ha recuperado de COVID-19.

No está claro todavía si el crecimiento rápido de los casos de ómicron se debe a que la variante evade la inmunidad existente, es inherentemente más transmisible que las variantes anteriores, o una combinación de ambas, señaló la OMS.

Otras preguntas importantes sobre la variante ómicron siguen sin respuesta, incluida la eficacia de cada una de las vacunas existentes contra COVID-19. Tampoco existen todavía datos concluyentes sobre otros detalles de la ómicron, afirmó la agencia de salud.

La OMS etiquetó por primera vez a Ómicron como una variante de preocupación el 26 de noviembre.