El peligro de dejar los carbohidratos
Mucho ojo con las dietas que los dejan fuera, aseguran en investigación.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 años.
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Los carbohidratos son un tema de discusión y muchas personas los evitan a toda costa para no subir de peso. Es importante dejar claro que son nutrientes necesarios para el organismo; sin embargo, los que se deben comer son los provenientes de fuentes naturales y no los procesados, ya que éstos últimos sí aumentan el peso y pueden desarrollar múltiples enfermedades graves si se consumen frecuentemente.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), los carbohidratos se transforman durante el metabolismo en energía y se liberan en dióxido de carbono. Las dietas bajas en carbohidratos han mostrado que se evita la resistencia a la insulina y al síndrome metabólico (asociado con la diabetes tipo 2), ya que se mejora la salud cardiovascular y se reduce el riesgo de diabetes. También ayuda a mantener el cerebro saludable.
Sin embargo, de acuerdo con una investigación publicada en "The Lancet Public Health", las dietas bajas en carbohidratos elevan la probabilidad de muerte prematura. El estudio señala que una ingesta menor al 40 o mayor al 70 por ciento de consumo diario de carbohidratos se asocia con un mayor riesgo de mortalidad, mientras que el consumo entre 50 y 55 por ciento se asocia con un menor riesgo.
La investigación encontró que la mortalidad aumenta cuando los carbohidratos son reemplazados con grasas o proteína animal; mientras que si se sustituyen con plantas el riesgo disminuye. La experta en nutrición Fernanda Alvarado señala que "lo importante es encontrar un equilibrio adecuado. La recomendación para el consumo de carbohidratos en la dieta es entre el 40 y el 60%". Sin embargo, Alvarado recalca que "entre más activa sea una persona, mayor es su requerimiento de carbohidratos" y que es preferible consumir los naturales como proteínas de origen vegetal, frutas, legumbres, viandas y pastas, arroz y panes integrales.