Cuida tus pulmones
Los pulmones son el órgano principal del sistema respiratorio, el blanco principal del COVID-19.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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Existen muchas enfermedades que se ensañan con el sistema respiratorio y castigan duramente a los pulmones, por lo que es importante conocer si existe la posibilidad de fortalecer esos órganos para que puedan batallar cualquier condición que se presente.
Primeramente, hay que establecer los enemigos directos del sistema respiratorio y estas son las enfermedades pulmonares, las cuales se dividen en dos grupos principales: las enfermedades obstructivas y las restrictivas.
“En las enfermedades obstructivas están los pacientes asmáticos y el grupo de los pacientes que desarrollan COPD o la enfermedad obstructiva pulmonar crónica. La causa más común de esta enfermedad es el cigarrillo. Entre los grupos de las enfermedades restrictivas, donde el paciente tiene problemas para que el aire entre a los pulmones, tenemos la fibrosis pulmonar que es uno de los más significativos porque puede llegar a fallo respiratorio y no tiene tratamiento”, dijo la doctora Daphne Delgado, neumóloga y presidenta de la Sociedad Puertorriqueña de Neumología.
No obstante, los pulmones también son víctimas de problemas infecciosos como las pulmonías adquiridas en la comunidad, que pueden ser bacterianas o virales; complicaciones por influenza, micoplasma, traqueobronquitis, bronquitis virales y el ya conocido COVID-19.
En el caso de las enfermedades infecciosas, ya entrados en la temporada de influenza, los doctores temen que existan ataques simultáneos de influenza y coronavirus en la población.
“Ese es el gran temor de todos nosotros, qué pasa si tenemos un paciente con influenza o COVID-19. Hemos visto a pacientes que les da influenza A y B a la vez. Eso puede pasar con el COVID-19 y el temor es que sea doble el peligro porque vemos que los problemas con el COVID-19 pueden llevar al paciente a fallo respiratorio y los problemas con la influenza se complican con la pulmonía viral, así es que sería la tormenta perfecta, dos pulmonías causadas por dos virus bien malos”, sostuvo la también especialista en cuidado crítico.
Según la doctora, no hay muchas alternativas para proteger a los pulmones de estas condiciones, además del uso de mascarilla, el distanciamiento y la higiene, por lo que instó a las personas a darle cierta protección adicional a los pulmones vacunándose contra la influenza.
“No tenemos tal cosa como algo para fortalecer el sistema respiratorio. A falta de la vacuna contra el COVID-19, la vacuna de la influenza es nuestra mejor arma, ahora mismo, para protegernos y evitar que, si nos diera influenza y COVID-19 a la vez, tengamos complicaciones severas, fallo respiratorio, intubación y ese tipo de cosas. Así que la exhortación a todo el mundo es vacúnese porque, por lo menos así tiene anticuerpos que le ayuden a que no se complique si está expuesto a la influenza”, recomendó la neumóloga.
Además, Delgado mencionó ciertos ejercicios que los pacientes con condiciones pulmonares severas pueden realizar para mejorar su calidad de vida.
“El ejercicio ayuda en cierta forma, pero, más que nada, sirve a aquellos que ya tienen una condición respiratoria para entrenar esos músculos respiratorios. Hay ejercicios para pacientes que tienen enfisema o COPD avanzado y para ellos se usan ciertos ejercicios como training para músculos de las extremidades superiores, terapia física y hemos visto que mejora las actividades del diario vivir en estos pacientes”, indicó.
En cuanto a ejercicios para los pacientes con COPD, con enfisema, que ya tienen una categoría más severa, la neumóloga afirmó que existe la rehabilitación pulmonar. “Estos son unos ejercicios específicos que el neumólogo hace con el paciente para mejorar su calidad de vida”.
En el caso de las personas con asma (enfermedad inflamatoria de los bronquios), la especialista sostuvo que, la gran mayoría de las veces, esta condición tiene que ver con procesos alérgicos y que muchas personas, aunque se cuiden, tienen una predisposición genética.
“Hay pacientes que desarrollan el asma haciendo todo lo que pueden hacer, haciendo buena dieta, no fumando, pero tienen una base genética que los puede llevar a tener la condición. Eso no significa que estos pacientes no puedan hacer ejercicio, ejercicios aeróbicos como sean tolerados y ejercicios respiratorios como el yoga, y eso todo es para tratar de ayudar la parte muscular respiratoria”, sostuvo Delgado.
No obstante, la presidenta de la Sociedad Puertorriqueña de Neumología aceptó que “nada de esto ha probado que haga un cambio o tenga un impacto en la función pulmonar de un paciente”.
Sin embargo, sí recomendó evitar el cigarrillo, si se quieren tener unos pulmones saludables.
“De la forma en que mejor puedes cuidar tus pulmones es no fumando. El fumador pasivo también tiene un riesgo de enfermedad, así que tienes que tratar de limitar esa exposición lo más que puedas”, concluyó la especialista.