En las relaciones de pareja, las discusiones y diferencias pueden parecer inevitables. Si bien muchas personas logran conversar sobre el asunto y llegar a acuerdos, en otras ocasiones llega el momento en el que una separación, aunque sea temporera, puede parecer el mejor curso.

“Para tomarse un tiempo, las personas que conforman la pareja tienen que tener una madurez emocional significativa”, explica el sexólogo Juan Carlos Malavé Rexach. “(El problema es que) muchas veces el tiempo que buscan para separarse es para buscar algún tipo de excusa para, después de las ‘vacaciones’, venir una separación permanente”, destaca.

Por otro lado, la situación es diferente si la relación que les une es de noviazgo o de matrimonio. “En el matrimonio, hay unos acuerdos establecidos y ciertas situaciones legales  que no hay en el noviazgo”, comenta Malavé.

Lo primero que hay que determinar es qué te está motivando a distanciarte. “Ese tiempo de separación no es para, como quien dice, pensar en cómo lo vas a dejar”, señala el sexólogo. “Estamos hablando de una verdadera toma de decisión y  de establecer un límite de tiempo para darse un tiempo de reflexionar porque,  verdaderamente,  queremos continuar con la pareja”.

Antes de tomar la decisión de separarse por un tiempo, deben decidir, serenamente, cuánto tiempo necesitan de distanciamiento y qué razones los están llevando a ello.

“No es, como dicen por ahí:  ‘Vamos a darnos tiempo para ver si todavía te quiero, porque te veo todos los días, porque es monotonía, es para ver si te necesito’. Absolutamente no. El tiempo es para reflexionar sobre las situaciones que no van bien en la pareja y ver cómo las vamos a modificar, tanto juntos como individualmente”, concluye.

***Juan Carlos Malavé Rexach es sexólogo del Instituto de Servicios Educativos y Psicológicos de Puerto Rico y profesor en el Colegio Universitario de San Juan. Para consultas, llama al 787-768-3320 o visita www.sexologopr.com.

Al momento de tomar la decisión:
1. Sé sincero/a. Expón claramente los puntos que te están preocupando de la relación.
2. Reflexiona. No es cuestión de echarle las culpas al otro,  determina cómo puedes aportar para mejorar la relación.
3.  Exprésate. Ofrece ideas sobre cómo superar las diferencias.
4. Deja las cosas claras. Clarifica que el distanciamiento no es un rompimiento de la relación, sino un renacer.
5. No es un castigo. No tomes el espacio sólo por “darle una lección” a tu pareja.

Fuente: Juan Carlos Malavé Rexach, sexólogo.