En el marco del Día Mundial de la Diabetes, es fundamental destacar la importancia de cuidar la salud cardiovascular en aquellos que viven con esta enfermedad.

La diabetes, una condición crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo, no solo impacta el control del azúcar en la sangre, sino que también podría aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Adoptar un enfoque integral para proteger el corazón se vuelve esencial en la gestión de esta enfermedad.

El Día Mundial de la Diabetes se celebra el 14 de noviembre de cada año. Fue establecido por la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1991 en respuesta al creciente aumento de la diabetes en todo el mundo.

De acuerdo con la OMS, el objetivo principal de este día es aumentar la conciencia global sobre la diabetes, sus factores de riesgo y cómo prevenirla. También busca destacar la importancia del acceso a la educación y la atención médica para las personas que viven con diabetes.

Anualmente, el Día Mundial de la Diabetes se centra en un tema particular, siendo para los años 2021-2023 ‘el acceso a los cuidados de la diabetes’. Este enfoque tiene como propósito fomentar, educar y destacar la significativa relevancia del diagnóstico y de los cuidados esenciales para las personas con diabetes.

El objetivo fundamental es asegurar que aquellos que viven con esta condición logren un manejo efectivo de la enfermedad, experimenten una vida plena y eviten complicaciones tanto a corto como a largo plazo.

Protegiendo el corazón de la diabetes: recomendaciones clave para una vida saludable

El portal web del ‘Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades indica que, la diabetes y la enfermedad cardíaca a menudo van de la mano, aumentando el riesgo de complicaciones serias. Aquellos con diabetes enfrentan el doble de probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares a una edad más temprana que aquellos sin diabetes.

Además, a medida que la diabetes persiste en el tiempo, el riesgo de enfermedad cardíaca aumenta.

Sin embargo, la buena noticia es que simples cambios en el estilo de vida no solo pueden proteger el corazón, sino también ayudar en el manejo efectivo de la diabetes.

¿Cómo la diabetes afecta el corazón?

Con el tiempo, los niveles elevados de azúcar en la sangre pueden provocar daño en los vasos sanguíneos y los nervios que están bajo el control del corazón. Aquellas personas con diabetes también tienen mayores probabilidades de desarrollar otras condiciones que incrementan el riesgo de padecer enfermedad cardíaca, estas son:

-La presión arterial elevada aumenta la fuerza con la que la sangre circula por las arterias, pudiendo causar daño en dichas arterias. La combinación de presión arterial alta y diabetes puede aumentar significativamente el riesgo de enfermedad cardíaca.

-Niveles elevados de colesterol LDL (“el malo”) en la sangre pueden dar lugar a la formación de placa y dañar las paredes arteriales.

-La creencia es que tener niveles altos de triglicéridos (un tipo de grasa en la sangre) junto con bajos niveles de colesterol HDL (“el bueno”) o niveles altos de colesterol LDL contribuyen al endurecimiento de las arterias.

Es importante destacar que ninguna de estas condiciones presenta síntomas evidentes. Un simple análisis de sangre y una revisión de la presión arterial por parte del médico pueden ayudar a determinar si los niveles de colesterol LDL y HDL, así como los triglicéridos, están elevados.

Por otra parte, la presencia de los siguientes factores también puede incrementar la probabilidad de desarrollar enfermedad cardíaca:

-Fumar

-Exceso de peso u obesidad

-Actividad física insuficiente

-Dieta con elevado contenido de grasas saturadas, grasas trans, colesterol y sodio (sal)

-Consumo excesivo de alcohol

Además, las personas con diabetes enfrentan un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca, una condición seria que afecta la capacidad del corazón para bombear sangre de manera efectiva.

Cómo cuidar el corazón y manejar la diabetes: recomendaciones

Realizar cambios en el estilo de vida puede reducir significativamente el riesgo de enfermedad cardíaca y mejorar la gestión de la diabetes:

1. Controlar los niveles de glucosa:El control efectivo de los niveles de glucosa en la sangre es fundamental. Mantenerlos dentro de los rangos recomendados por el médico ayuda a prevenir complicaciones a largo plazo, incluidas enfermedades cardíacas. Esto implica llevar un registro regular de los niveles de azúcar, seguir una dieta equilibrada y ajustar la medicación según las indicaciones del profesional de la salud.

2. Adoptar una dieta saludable:Una alimentación equilibrada es clave para mantener el corazón sano. Priorizar alimentos ricos en fibras, como frutas, verduras, granos enteros y legumbres, ayuda a controlar el azúcar en la sangre y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Limitar el consumo de grasas saturadas y trans, así como de sodio, también contribuye a la salud cardiovascular.

3. Mantener un peso saludable:El mantenimiento de un peso corporal saludable es esencial para controlar la diabetes y proteger el corazón. La pérdida de peso puede tener un impacto positivo en la sensibilidad a la insulina y en la reducción de factores de riesgo cardiovascular. Un asesoramiento nutricional adecuado y la práctica regular de actividad física son aliados importantes en este objetivo.

4. Realizar actividad física regularmente:El ejercicio regular no solo contribuye al control del peso, sino que también mejora la salud cardiovascular y ayuda a reducir los niveles de glucosa en la sangre. Se recomienda al menos 150 minutos de actividad moderada a la semana, como caminar, nadar o andar en bicicleta. Antes de comenzar un programa de ejercicios, es crucial consultar con el médico para asegurarse de que sea seguro y adecuado para cada persona.

5. Monitorear la presión arterial y el colesterol:Las personas con diabetes deben tener un control regular de la presión arterial y los niveles de colesterol. La hipertensión y el colesterol elevado aumentan significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares. En caso de ser necesario, se pueden implementar cambios en la dieta, la medicación o ambos para mantener estos factores bajo control.

6. Manejar el estrés:Estrategias como la meditación, la respiración profunda y el apoyo social pueden ayudar a manejar el estrés, un factor que puede contribuir a la enfermedad cardíaca.

Es importante destacar que, trabajar con un especialista en el cuidado de la diabetes y educación sobre la diabetes es esencial. Estos profesionales brindan apoyo, información actualizada y soluciones para prevenir complicaciones.

Además, asegúrese de pedir una remisión a su médico si aún no cuenta con un educador sobre la diabetes. La prevención y el manejo adecuado son clave para proteger su corazón y vivir de manera saludable con diabetes.