Los buitres tienen un problema de imagen. Considerados feos y vinculados con la muerte, se encuentran entre los animales menos queridos del mundo. Pero algunos conservacionistas en África intentan cambiar eso.

Para ello, han lanzado una iniciativa para salvar a buitres en peligro de extinción al cuantificar en dinero su increíble valor.

Un informe reciente de la organización de conservación BirdLife International estimó que los buitres aportan 1,800 millones de dólares al año a ciertos ecosistemas de África del Sur, lo que podría sorprender a cualquiera que no esté familiarizado con las labores de limpieza, control de plagas y lucha contra la caza furtiva que realiza cada uno de los carroñeros más eficientes del planeta.

“No están muy arriba en la escala de belleza. Y no son populares. Pero sabemos que son muy útiles”, señaló Fadzai Matsvimbo, un coordinador para prevenir la extinción en BirdLife International.

El informe llega en un momento importante para los buitres africanos: seis de las 11 especies que viven en ese continente han sido clasificadas como en peligro o en grave peligro de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, que reporta que los buitres están gravemente amenazados en muchas partes del mundo. En África, algunas especies han disminuido casi en 90%, agregó Matsvimbo.

Los ambientalistas esperan que el informe provoque que las autoridades y al público sean más conscientes del impacto positivo que tienen los buitres en su entorno.

ARCHIVO - Esta fotografía del 22 de septiembre de 2011 muestra un buitre de El Cabo en el Programa de Buitres en Boekenhoutkloof, cerca de la presa Hartbeespoort, Sudáfrica. (AP Foto/Denis Farrell, archivo)
ARCHIVO - Esta fotografía del 22 de septiembre de 2011 muestra un buitre de El Cabo en el Programa de Buitres en Boekenhoutkloof, cerca de la presa Hartbeespoort, Sudáfrica. (AP Foto/Denis Farrell, archivo) (Denis Farrell)

El informe se centró en investigaciones realizadas en Botsuana, Zambia y Zimbabue, y muestra cómo una estela de buitres —el término que se utiliza para referirse a un grupo de buitres que se alimentan juntos— puede dejar sin carne a un cadáver en descomposición en unas horas, con lo que limpian los ecosistemas, reducen la posibilidad de que se propaguen enfermedades y la presencia de plagas como ratas y perros salvajes, lo cual tiene un beneficio enorme para las comunidades humanas.

Los buitres también tienen un ácido estomacal extremadamente fuerte, no se intoxican con alimentos y son capaces de consumir y neutralizar ántrax, botulismo y otras bacterias y toxinas presentes en los cadáveres que matarían a otros animales, por lo que eliminan amenazas mortales del medio ambiente. Tan sólo esta semana, más de 50 hipopótamos murieron por presunto envenenamiento con ántrax en una reserva del Congo.

Los buitres son el “mejor servicio sanitario” de la naturaleza, observó Matsvimbo. Los ambientalistas han denunciado la drástica pérdida de buitres en India en los últimos 30 años y cómo eso desencadenó una crisis sanitaria. Un estudio publicado el año pasado reveló que medio millón de personas murieron en ese país por la propagación de bacterias e infecciones debido a la ausencia de buitres.

Matsvimbo reportó que los buitres en África también son utilizados como “centinelas” por los guardabosques, ya que suelen ser los primeros en detectar un animal muerto y los guían hacia zonas donde pueden encontrar a cazadores furtivos. Incluso han demostrado ser útiles para ayudar a los agricultores a localizar ganado muerto o herido.

Los buitres son únicos entre los vertebrados terrestres porque únicamente se alimentan de carroña: animales muertos. Esto los hace especialmente susceptibles al envenenamiento por parte de los humanos, ya sea intencionalmente por cazadores furtivos y otros que quieren deshacerse de ellos, o por error cuando el objetivo es eliminar plagas. Cientos de buitres pueden morir a causa de un solo cadáver envenenado.

Los buitres también mueren o a menudo quedan mutilados debido a colisiones con cables eléctricos en África. Y cada vez con más frecuencia se les mata con base en creencias, refirió Kerri Wolter, directora general del centro de rehabilitación de buitres Vulpro en Sudáfrica, que trata a buitres enfermos y heridos para liberarlos de nuevo en su hábitat natural.

Ella explicó que, debido a su excepcional sentido de la vista e instinto para encontrar a un animal muerto, algunas personas los consideran clarividentes y capaces de prever la muerte. Partes de su cuerpo —especialmente la cabeza— se utilizan en pociones o como amuletos para predecir el futuro.

“Nuestro trabajo consiste en cambiar la mentalidad de la gente”, apuntó Wolter. “Que vean a los buitres y piensen: ‘¡Guau, son increíbles!‘”.

Matsvimbo y Wolter dijeron que los cineastas de Hollywood han tratado a los buitres con crueldad, pues casi siempre los muestran como malvados y siniestros. Las películas les han causado a los buitres lo que “Tiburón” a los escualos, sostuvo Wolter.

“Me encanta ver ‘El Rey León’, pero cada vez que hacen la parte del buitre, me parte el corazón”, expuso Matsvimbo. “Los buitres nunca son representados de forma positiva. Tengo un hueso atorado con estos cineastas. ¿O debería decir que, más bien, me resultan un hueso duro de roer?”.