Los neoyorkinos tienen fama de amargados, siempre moviéndose apurados por las calles de la ciudad, especialmente en la época helada. Louboutina, una golden retriever de cinco años, no le hace caso a esa premisa y reparte buenos humordandos abrazos en las esquinas.

El humano de Loubie, César, le contó al sitio Babble que le enseñó a dar abrazos desde muy chiquita. Se agachaba a su nivel y le mostraba el placer de colgarse de sus hombros. Así, en los paseos por el barrio de Chelsea se hizo famosa por abrazar a quien sea que se le cruzara y le dijera hola.

De a poco juntó seguidores en Instagram, donde ahora tiene más de 120 mil fans, que pueden rastrear por dónde va a estar para buscar un poco de cariño. Según César, el 99,5% de los que la ven dice que su día mejoró después del abrazo. 

Según él: "La gente interrumpe lo que sea que está haciendo en su teléfono aunque sea para saludarla o sonreírle. Me alegra que estemos salvando la vida de los zombies del celular".