Las mujeres pueden enfrentar diferentes escenarios por los cuales se convierten en madres solteras y cada una, muchas veces, enfrenta diferentes desafíos.

Naychaly Rivera Nieves, presidente del Centro Piensa Psicología Innovadora, indica que una mujer puede convertirse en madre soltera, porque enviuda. “En este caso, es importante que la mujer pueda contar con el apoyo de sus familiares y los familiares del fallecido. Que tomen un rol activo ayudando a esta madre tanto económicamente, como en el aspecto educativo de los niños y como figuras de apoyo. Pasa que, a veces, el mismo duelo hace que los familiares se alejen un poco, cuando es ahí que más se necesita la unidad”, recalca.

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Según la experta, otras mujeres son madres solteras porque han tenido violencia de género. “Existen los hogares de apoyo que les ofrecen servicios psicológicos, así como servicios educativos y vocacionales. Es importante que ellas busquen de ese apoyo para enfrentar todos los nuevos retos que tienen. Necesitan empoderarse y aprender a manejar el sistema, buscando ayudas económicas, educativas y psicológicas, en lo que vuelven a restablecer su independencia”, sostiene.

Hay otras mujeres con hijos que confrontan problemas en la situación de pareja y deciden terminar con esa relación. “Ellas tienen que trabajar con su autoestima y con el desarrollo de un nuevo enfoque de vida”, manifiesta Rivera.

Como ellas hay muchas otras mujeres en Puerto Rico que por una u otra razón se convierten en madres solteras. Más del 33% de los hogares en la Isla están formados por jefas de familia; la mayoría son madres que viven solas con sus hijos y tienen toda la responsabilidad sobre estos.

De hecho, cuando hay problemas económicos en el País -como los que estamos viviendo ahora-, el sector más golpeado es el de los hogares que encabezan mujeres solas con niños.

El 80% de esas familias de madres solteras se ven en la necesidad de recibir ayudas del Programa de Asistencia Nutricional (PAN) y el llamado Plan 8, un subsidio federal a la renta de viviendas, entre otras. En muchos de esos hogares, además, hay niños que necesitan de cuidados y educación especial.

La presidenta del Centro Piensa Psicología Innovadora dice que no es secreto que sobre los hombros de estas mujeres recaen muchos retos.

“Uno de los principales desafíos que enfrentan las madres solteras es el manejo del tiempo. Ellas tienes que sacar tiempo para poder cumplir con las demandas que tienen como madres, las demandas que tienen como trabajadoras fuera del hogar, como amas de casa y hasta, inclusive, con sus parientes. Apenas tienen tiempo para sí mismas”, señala Rivera Nieves.

Explica la experta que con la situación económica del País, muchos puertorriqueños se han ido a vivir a los Estados Unidos y las familias se han separado.

 “Por esta misma situación, y por otras, algunas de estas mujeres tienen ayuda limitada de sus familiares, pero hay otras que realmente están completamente solas e incluso el padre de sus hijos también se ha ido de Puerto Rico y esto impacta en su calidad de vida. En realidad no tienen a nadie que las ayude con sus hijos”, destaca.

En cuento al entorno laboral, argumenta Rivera que una madre soltera que no cuenta con la ayuda de algún familiar, requiere de flexibilidad en el trabajo.

“Ella necesita tiempo para poder salir a buscar los niños a la escuela, para poderlos cuidar cuando estos se enferman e, inclusive, para asistir a las actividades escolares y extracurriculares de sus hijos”, expresa.

Comenta que en algunos empleos, la mujer soltera sí van a encontrar esa flexibilidad, pero en otros no e, inclusive, el tener que tomar tiempo de su trabajo para atender las necesidades de sus hijos puede llegar hasta costarle el trabajo.

“Muchas veces no son consideradas para posiciones de mayor responsabilidad, precisamente por ser madres solteras que tienen una gran responsabilidad hacia sus hijos”, subraya.

Una de las cosas que recomienda Rivera es que haya más lugares de empleos que tengan espacios más dinámicos y flexibles, que vayan desde beneficios como cuidos de niños, el poder trabajar desde el hogar con las computadoras y tener horarios flexibles, entre otros. “La compañía debería convertirse, en lo posible, en una red de apoyo para ellas, pero desafortunadamente esto no sucede mucho”, advierte.

Asegura la psicóloga que un problema grande que se da mucho es que muchas madres solteras tienen la tendencia de posponer sus cuidados de salud para atender los de sus hijos y de otros familiares. El tiempo que tienen en sus trabajos para vacaciones y enfermedad lo agotan para las necesidades de sus hijos y familiares y se quedan sin ese tiempo para ellas.

“A nivel psicológico, muchas padecen de desórdenes de ansiedad, incluso de depresión y, aun así, a pesar de las circunstancias tienen que seguir funcionando”, declara Rivera.

Además, dice que muchas carecen también de tiempo para el entretenimiento.

“Especialmente por lo costoso que les resulta. Si van a salir tienen que ir con los hijos porque no tienen a nadie que los cuide, por lo que el costo de entretenimiento es más alto y no tienen el dinero para ello”, sostiene.

Una opción que tienen las madres solteras y que puede resultar en un balance para éstas, es el autoempleo. ”Existen asociaciones y fundaciones que ayudan a las mujeres a alcanzar estas metas. Entre estas se encuentra la Asociación Matria, que ofrece cursos de autoestima y micropréstamos para desarrollar empresas, entre otras ayudas. Y también está el Centro para Puerto Rico de la Fundación Sila María Calderón, que ofrece cursos de mejoramiento personal y de cómo comenzar sus propia empresa, por ejemplo”, expone Rivera.

Por su parte, la licenciada Sara Tolosa, directora de programas y servicios del Centro para Puerto Rico de la Fundación Sila María Calderón cuenta que en el programa de Formación Empresarial para la mujer que ofrece la Fundación, en estos momentos hay 106 mujeres capacitándose para comenzar sus iniciativas empresariales o fortalecer un negocio existente. Casi el 60% de ellas son jefas de familia, son madres solteras.

“Nuestros programas les ofrecen una oportunidad para que puedan lograr una independencia económica y, a su vez, esto contribuye a que mejoren su autoestima ante su familia y ante sociedad al proyectarse como mujeres que están sobreponiéndose a los retos para salir hacia adelante”, recalcaTolosa.

Según la licenciada, entre los mayores desafíos que expresan las madres solteras que asisten al Centro, está el que no tienen los ingresos suficientes para mantener a sus familias; para darles a sus hijos oportunidades de tener una buena educación, servicios de salud adecuados y servicios recreativos para éstos.

“Pero sobre todo, el mayor desafío que tienen es el poder empoderarse, para demostrarse a sí misma y al resto de la humanidad que poseen el potencial para lograr todas sus metas en igualdad de condiciones”, reconoce.

“Nuestros programas, más allá de brindar unos talleres de formación empresarial, trabajan con el aspecto humano y les brindan servicios de apoyo. Nosotros creemos en ellas y ellas depositan su confianza en nosotros y al final del camino salen transformadas”, concluye.

Finalmente, Rivera Nieves añade que es importante que todas y cada una de estas madres solteras trabajen con el manejo del tiempo y con en el desarrollo de una vida nutritiva que las incluya a ellas.

“También tienen que desarrollar la confianza para volver a experimentar con nuevas relaciones de pareja en un futuro. Después de todo, la vida continúa”, reitera.

Lugares de apoyo

-Proyecto Matria 

-Centro para Puerto Rico | Fundación Sila MaríaCalderón