Se acerca el comienzo del nuevo año escolar y para algunos niños será su primer día de clases en un ambiente desconocido para ellos.

Para esto la Academia Americana de Pediatría exhorta a los padres a que conversen con sus hijos y les expliquen que no serán los únicos asustados, que encontrarán otros niños como ellos y que tendrán maestros que les ayudarán a sentirse cómodos.

Es importante decirles que será divertido y que harán nuevos amigos.

Bulto

Pero no tan solo ser nuevo en una escuela puede causar ansiedad en un estudiante, cargar un bulto no adecuado le puede afectar su salud y hasta su conducta.

Pediatras recomiendan el uso de mochilas con tirantes anchos y acojinados. Recalcaron que es sumamente importante que los libros más pesados se coloquen en el medio y que nunca debe pesar más del 10 al 20 por ciento del peso del niño.

Por lo general los padres siempre consideran comprar mochilas con ruedas para los más pequeños, esta es una muy buena opción, tomando en cuenta si suben escaleras con el bulto.

Alimentación

En momentos en que muchas escuelas están bajo el plan de racionamiento, que tendrán horarios alternos por la falta de agua y donde no se ofrecerá desayuno es necesario que los padres expliquen a sus hijos la importancia de desayunar antes de salir. En caso de que puedan llevar alguna merienda, empaque alimentos saludables y restrinja las bebidas gaseosas, pues beber una sola lata al día incrementa el riesgo de su hijo de sufrir obesidad en un 60 por ciento.

Hábitos de estudio

Una vez ya pasan los días su hijo se irá adaptando a su rutina de estudiante, entenderá que es necesario levantarse temprano, desayunar y tener sus materiales escolares listos para cada día.

Es aquí donde los padres también deben crear un ambiente propicio para el estudio.

La Academia Americana de Pediatría aconseja a los padres a brindar un área, ya sea en el cuarto u otra parte de la casa, para que sus hijos dediquen tiempo a hacer sus asignaciones y estudiar. El lugar debe ser uno tranquilo y se debe aplicar la regla en que el televisor esté apagado mientras se realizan las tareas.

Es responsabilidad de los padres supervisar el uso del internet, estar disponible para contestar preguntas y ayudar a su hijo de la manera en que este lo necesite. Si su hijo tiene problemas con una materia en particular y no puede ayudarle, un tutor o maestro particular puede ser una buena solución.