Una de las partes más difíciles en la relación entre adultos y adolescentes es la conexión. Como dije en mi libro “EduLíder emocional”, “los jóvenes no les hacen caso, están en la computadora, en el celular enganchados, ignoran a quienes les hablan, están a la defensiva. Los adultos… no saben cómo establecer esa conexión”. ¿Te identificas? Pues entonces estos cinco consejos son para ti.

1. Identifica y gestiona tus emociones. Antes de hablar con tu joven, revisa cómo te sientes y qué estás pensando. ¿Estás listo para escuchar y comunicarte desde la razón y no desde la emoción? Verifica si es el momento adecuado. Si tienes coraje, estás ansioso, tenso, triste o frustrado, no es el mejor momento para conversar.

2. Escucha activamente. Esta habilidad logra que el joven se sienta en confianza. Debes estar atento a lo que te quiere decir, mostrando interés. ¿Cuáles son sus expresiones? ¿Con qué emoción me lo está transmitiendo? ¿Está buscando un consejo, o solo que lo escuche? ¿Por qué me lo está diciendo? Cuando termine de hablar, verifica el mensaje haciéndole preguntas o resumiendo lo que te contó. Recuerda no juzgarlo y prestarle toda tu atención.

3. Comunícate con el corazón. Demuestra tu autenticidad. Tómate el tiempo necesario para escucharlo con empatía y respeto, conectándote auténticamente, dando tu opinión sin imponerte y siendo asertivo.

4. Conecta. Identifica cuál es tu estilo de comunicación, porque la manera en que te comunicas con tus jóvenes depende mucho de tu crianza. Los estilos de comunicación son:

  • Estilo pasivo: Siempre dice que sí por qué no sabe decir no
  • Estilo agresivo: Está a la defensiva, quiere ganar y controlar
  • Estilo asertivo: Directo, conciso, le gusta escuchar y observar

También es importante que conozcas los tipos de comunicación de tu joven. Obsérvalos y escúchalos para que comprendas cómo se conectan con los demás. Los tipos de comunicación son:

  • Comunicación oral. Mensajes de voz, vídeos, llamadas por el celular
  • Comunicación escrita. Emojis, mensajes de texto, redes sociales
  • Comunicación no verbal. Gestos con la cara, los hombros, los dedos, los ojos, cuando se tocan el pelo y con la postura del cuerpo

5. Decide ser el modelo inspirador. Guía a tu joven con tu ejemplo. Debes ser emocionalmente consciente, saber escuchar y servir a otros. Demuéstrale cómo desarrollar, fortalecer y practicar destrezas de liderazgo y de inteligencia emocional para que sean exitosos, puedan conectar y tener relaciones saludables.

En fin, para conectar con tu joven hay que tomar acción. Es necesario crear nuevos hábitos, gestionar tus emociones, mantener una buena comunicación, escuchar activamente, conectar exitosamente y decidir ser su modelo 24/7. Es algo que toma tiempo, pero si eres consistente y persistente, lo lograrás. ¡Voy a ti!

(La autora es especialista en liderazgo educativo e inteligencia emocional, autora puertorriqueña de EduLíder Emocional. Para más información www.barbaraflores.info)