Cinco meses atrás, la vida de Carlos Morales cambió para siempre. El sueño que siempre tuvo de ser padre se hizo realidad, pero esa alegría le costó la vida a su esposa Erica, justo luego de parir cuatro bebés.

“No sabía cómo iba a ser vivir sin ella. Pero cinco meses después es que entiendo por qué aún estoy aquí. Mis bebés son mis cuatro hermosas bendiciones”, declaró Carlos a la revista People.

“Se están volviendo pequeñas personas. Solo desearía que Erica pudiera verlos crecer”, dijo con una sonrisa.

Carlos expresó a la revista que vive un día a la vez con sus tres niñas y un niño. “Este no era el plan. Se suponía que Erica estuviera aquí. Todavía llego a casa del trabajo y miro nuestras fotos juntos. Miro su Facebook y nuestros mensajes de texto”.

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“Pero sé que voy a estar bien. Tengo que estarlo. Tengo cuatro hermosos niños que criar”, añadió.

Desde que perdió a su esposa, Carlos ha tenido un increíble apoyo de parte de su comunidad en Phoenix.

El padre creó una cuenta en la página para recaudar fondos GoFundMe, donde aproximadamente 13mil personas han aportado casi medio millón de dólares.

Además, su historia capturó la atención del comediante Steve Harvey. Éste se sintió tan tocado por la situación que sorprendió a Carlos con numerosos regalos y además les dio un fondo escolar de $10,000 para cada niño.

“Cuando me lo dijo no podía creerlo”, expresó Carlos.

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Morales, agente de bienes raíces, y su esposo, Carlos, que trabaja en el sector industrial, habían intentado tener un bebé durante años.

“Todo lo que hago es por mis hijos y su futuro. La educación es muy importante. Estoy preocupado por el dinero y eso me hace sentir muy aliviado”.

La historia de Carlos recorrió el mundo unas horas después de que los chiquillos nacieran. Erica llegó al hospital con alta presión y durante el procedimiento perdió mucha sangre.

“Todavía recuerdo ese momento. Todo fue maravilloso. Erica lo hizo muy bien, los bebés estaban súper sanos. Fue perfecto”, comentó el hombre de 29 años.

La mujer murió el 16 de enero a la 1:50 a.m.. “No podía respirar, no podía hablar”, recordó Carlos.

Tracy, Paisley, Erica y Carlos, Jr. están bien y con su papá.