Muchos ven su ropa como una manera de expresarse, exaltar cualidades y ocultar defectos. Pero, de seguro, pocos saben que las prendas de vestir también pueden ser aliadas en la salud.

Según la Skin Cancer Foundation (SCF), fundación internacional dirigida a prevenir el cáncer de piel, la ropa es la forma más eficaz de protección solar.

La dermatóloga Denise Mago explica que hay tres modos de protegerse contra la radiación ultravioleta UV: bloquearla, absorberla o reflejarla. La ropa cumple con las tres, explica.

Susana Misticone, dermatóloga, agrega que la protección que ofrece un determinado tipo de ropa depende de cuatros factores esenciales: color, tipo de material, densidad de las fibras y grosor de la tela.

Mientras más claros sean los colores de la ropa menor protección solar ofrecen; en cambio, mientras más oscuros, mayor protección. Una prenda oscura brinda mayor protección que una de la misma tela pero de color claro, explica. También hay que tener en cuenta que la ropa oscura absorbe más los rayos del sol, por lo que también va a aumentar su temperatura.

Así que tampoco es recomendable ir de negro cuando hace sol y mucho calor.

El tipo de tela también determina el nivel de protección. La SCF indica que las fibras sintéticas y semisintéticas ­como el poliéster y el rayón­ ofrecen la mayor protección solar. El algodón o crepé refinado y blanqueado ofrecen la menor. Y las telas brillantes, como el raso, reflejan más radiación UV de la piel en comparación con las telas mate, como el lino.

Misticone añade que la lana y el neopreno son los que dan una mejor protección en todos los rangos de radiación UV.

Densidad y grosor

Las telas de tejido apretado o estrechamente tejida tienen agujeros más pequeños entre los hilos. Es por eso que no permiten entrar tanta radiación UV como las telas con un tejido suelto o abierto, como un encaje. Asimismo, en el portal de la SCF se indica que los materiales ligeros y delgados, incluyendo algunas sedas y algodones blanqueados, dejan pasar más la luz ultravioleta que los tejidos más densos y pesados como la pana.

Misticone coincide en que la densidad de las fibras así como el grosor de la ropa son dos factores muy influyentes cuando se trata de protección.

Cuanto mayor sea la densidad de fibras y el grosor, menor capacidad tendrán los rayos del sol de atravesar la ropa.