La invitación leía así: “¡Nos casamos! Hoy a las 9:00 p.m., por Zoom. Están todos invitados”.

Seguramente entre los 45 mil seguidores que tiene el comediante Emanuel “Keropi” Sánchez en su Facebook muchos pensaron que se trataba de otro de sus vídeos o transmisiones cómicas.

El anuncio era real: el pasado 6 de abril Samantha Contreras aceptó ser la esposa de Keropi en una boda que se inició en la casa y que recorrió el mundo virtual a través de las plataformas sociales.

En un principio ella se resistía a transmitir la ceremonia, sino mejor dejarla entre los familiares y amistades que convocaron vía la plataforma Zoom. Pero reconoció que su pareja tiene presencia en las redes sociales y aceptó.

“Fue un poco raro pero tuvimos una boda de 600 invitados”, compartió la madre de dos hijos.

“Estuvo buena porque todo el mundo se conectó y fue un momento alegre, porque como están en las casas, veías las caras alegres y pompiaos, algunos se vistieron con gabanes, pero con pantalones de básket”, agregó, por su parte, el ahora esposo.

Realmente no era la boda que tenían pensada. Su intención era convocar a sus seres queridos a una fiesta -lo que queda pospuesto hasta que finalice la cuarentena-, y de paso contraer matrimonio. La fecha original la pautaron para octubre para poder ahorrar dinero y poder complacerse con la luna de miel que sueñan en Punta Cana, República Dominicana.

Les pareció entonces que la fecha era muy lejana y optaron por adelantarla para el 9 de mayo. Pensaron, “nos casamos y nos vamos a Punta Cana, pero planificando eso, pasó todo lo del coronavirus y nos quedamos puyús”, contó el recién casado.

Nos casamos

Posted by Keropi Sanchez on Monday, April 6, 2020

Ante la nueva realidad del aislamiento social, cada uno quedó en sus respectivas residencias, limitados de compartir, ya que no querían convivir. Ambos son de creencia cristiana y participan activamente en la iglesia Casa de Misericordia el Gran Yo Soy.

Decidieron preguntarle al pastor Juan Daniel Vélez Pérez si les echaba la bendición, lo que él aceptó, pero eso no los casaría oficialmente.

Fue un poco raro pero tuvimos una boda de 600 invitados“

-Samantha Contreras, recién casada

Iniciaron entonces los trámites oficiales con los documentos del Registro Demográfico, asistieron al laboratorio temerosos por el contagio al coronavirus y un médico hizo la excepción, entre las prioridades de salud que demanda la pandemia, y les firmó los documentos.

Dos días después, se estaban casando desde la sala del hogar que comparten.

“Delante de la ley estamos bien, delante de Dios estamos bien, y lo más que vale, es nuestro compromiso”, puntualizó Keropi, quien mantiene una audiencia con entrevistas, comedias y prédicas.

La reacción de las personas en las redes los ha llevado a servir de orientadores a otras parejas que están considerando darse el sí virtual.