La quimioterapia y la radioterapia son métodos que muchos pacientes de cáncer buscan para eliminar de su cuerpo tan terrible mal. Sin embargo, los efectos secundarios de estos tratamientos crean una transformación en la imagen de quienes los reciben, que, en ocasiones causan un efecto negativo en su estado de ánimo.

Para ayudar a que mujeres que pasan por esta experiencia puedan realzar su imagen y sentirse mejor, hace cinco años que la peluquera y empresaria Waleska Gómez Zapata comenzó a celebrar cada mes de octubre el evento Glamorizing Hope, en su salón de belleza Caras del Millennium.

“Tenemos como compromiso que todos los años en octubre sacamos un ratito para darle servicios a mujeres pacientes de cáncer. Pensamos que el talento que Dios nos ha dado es para trabajar y ganar dinero, pero también para dar a los demás, aunque nosotros también recibimos mucho de ellas durante este día”, menciona Gómez Zapata.

Ese día el salón de belleza ubicado en la avenida Roosevelt en Hato Rey cierra sus puertas al público general y su personal se dedica a ofrecer servicios de corte, peinado, maquillaje, manicura, pedicura y tratamientos faciales a la decena de pacientes que llega hasta allí. Las pacientes son seleccionadas por personal de la Sociedad Americana Contra el Cáncer (SACC) y del Puerto Rico Hope Lodge, un albergue temporero libre de costo para pacientes con cáncer.

Arleen Colón, gerente de programas de la SACC, señala que esta entidad cree firmemente en los efectos que tiene el cuidado de la imagen en el éxito de los tratamientos contra el cáncer. Por eso, durante todo el año mantienen vigente el programa “Luzca bien, siéntase mejor”, que ofrece talleres de maquillaje a participantes de sus cinco centros en Mayagüez, Arecibo, San Juan (central, este y  sur).

“El diagnóstico de cáncer no es fácil para nadie, pero este tipo de actividad es importante porque mientras más positivo tú tomes un diagnóstico, más efectivos son los tratamientos y más rápida es la recuperación. Creemos que es una actividad que le da ánimos a la mujer en un momento tan difícil”, asegura Colón.

Imagen de esperanza

Para Karla Marie Santiago Velázquez -quien en los últimos tres años ha batallado con diversos tipos de cáncer, primero de seno, luego de un nódulo axilar y ahora de pulmón-, este tipo de actividad es como un respiro en su agenda que desde el 2013 está colmada de citas médicas, quimioterapias y tratamientos médicos.

“Es un día de relajación, de no pensar en el tratamiento, de compartir lo que nos está pasando, cómo nos sentimos y a la vez de olvidarnos un poquito de la enfermedad para pasar un día relax. El escuchar que somos pacientes de cáncer es un poquito fuerte. Sin embargo, hay que luchar, hay que seguir hacia adelante, vivir el día a día, gozarse cada instante con tu familia, saber que vamos a estar bien, tomar el tratamiento”, señala la joven carolinense de 33 años.

Por su parte, Julia Márquez, quien tiene un diagnóstico de cáncer de seno, hígado, esófago y hueso, señala que actividades como ésta la ayudan a mantener el ánimo arriba.

“Me gusta ponerme siempre mis pantallas, estar maquillada y estar así, al natural. Estas actividades nos ayudan porque nos fortalecen y nos vemos lindas en el espejo. No debemos dejar que el cáncer nos ponga tristes y desanimadas, tenemos que continuar cuidándonos como mujeres. El cáncer es una nueva vida que tenemos que comenzar y aprender a vivir con él”, asegura Márquez.