Un nuevo informe de las Naciones Unidas reveló que al día de hoy un promedio de 58 millones de niños en edad pre-escolar no acuden a la escuela, y más de la mitad de estos menores son niñas.

De estas, tres cuartas partes vive en el sur de Asia y en los países africanos que están localizados al sur del desierto de Sahara. 

En cuanto al nivel secundario, la participación ha aumentado, pero sigue siendo menor en comparación con el nivel primario. 

Aunque las  disparidades de género relacionadas con el acceso a la educación también se han reducido, siguen siendo más amplias en el nivel de educación superior. Establece igualmente que aunque la participación de las mujeres en el nivel superior ha aumentado globalmente y supera la participación masculina en prácticamente todos los países desarrollados, siguen teniendo una baja representación en los campos relacionados con la ciencia, la ingeniería y la construcción.

Están también muy poco representadas en los programas avanzados en ciencias, lo que está directamente relacionado al hecho de que sólo el 30% de los investigadores a nivel mundial sean mujeres. Una cifra que, aclaran, ha aumentado con el pasar de los años pero que continúa estando muy lejos de la paridad.

El progreso al acceso a la educación también ha tenido sus avances en cuanto a la alfabetización de adultos. La analfabetización entre los jóvenes se ha erradicado en muchas regiones y actualmente la gran mayoría de este sector tiene los conocimientos y habilidades básicas en la lectura y escritura. No obstante, se estima que 781 millones de personas entre los 15 años o más son analfabetos. De éstos, dos tercias partes son mujeres, una proporción que se ha mantenido intacta por las pasadas dos décadas. 

También concerniente a la analfabetización, sigue siendo más prevalente entre las personas de 65 años o más y en África y Asia.

En el documento se advierte que junto con el envejecimiento de la población, se hace más pertinente el establecimiento de programas de alfabetización que le permita a este sector ser autosuficiente e ingresar a la fuerza laboral.   

The World’s Women 2015, de la división de Estadísticas de las Naciones Unidas, analiza otras áreas de suma importancia, como la salud, la pobreza, el trabajo y la violencia contra la mujer.