Las chicas del siglo XXI son profesionales preparadas, astutas e independientes en el manejo de sus finanzas. Si quieres formar parte de este grupo elite de chicas, tienes que comenzar a tomar control de tus finanzas. Comenzaremos por conocer el manejo efectivo de tres de las áreas neurálgicas en las finanzas: los préstamos personales, las tarjetas de crédito, y las cuentas de cheque y ahorros.

Las féminas han pasado a tomar el rol de jefas de familia en nuestra sociedad, por lo que es de suma importancia dominar los aspectos básicos de las finanzas, para  mantener así la autosuficiencia, el control financiero y la paz mental.

Préstamos personales 

Estos son la solución a la hora de consolidar deudas a mediano y corto plazo. Si nos encontramos en problemas con las tarjetas de crédito y las mueblerías, por ejemplo, el préstamo personal será nuestro mejor aliado.

Tarjetas de crédito 

Si las utilizas correctamente, serán de gran ayuda. De lo contrario, si abusas de su uso,  te causarán  muchos dolores de cabeza. Una tarjeta de crédito es esencial para viajar, alquilar auto, pagar hoteles, los seguro de viajeros y emergencias médicas. Sin embargo, se convertirán en tu peor enemiga  si la utilizas de forma cotidiana y no las pagas en su totalidad al vencer el corte de la cuenta. Otro ejemplo del uso inadecuado de la tarjeta de crédito es cuando se utiliza para ir de compras donde un día compras una pieza de ropa, al otro día otra pieza, y así consecutivamente,  hasta que llega el momento en que no puedes pagar el balance total. Esta conducta ocasiona el descuadre del presupuesto. La trampa psicológica de las tarjetas, es precisamente hacer que el individuo gaste más de lo presupuestado.

Cuentas de cheque y ahorros

La cuenta de cheques es la base del presupuesto ya que es en esta  cuenta donde se deposita el ingreso, para luego pagar deudas y transferir sobrantes a la  partida de ahorros. Siempre recuerda que los sobregiros en las cuentas de cheque denotan una mala administración de las finanzas o descuadre del  presupuesto. Las cuentas de cheques son el termómetro del banquero. Si existen sobregiros, esto denota comienzos de deterioro financiero o descontrol temporero de sus finanzas. Por otra parte, la cuenta de ahorros se utiliza para cubrir improvistos, tales como enfermedades, ruptura de enseres en el hogar o vehículos de motor. Es común el utilizar la cuenta de ahorros como herramienta para guardar dinero para viajes o vacaciones. Esto denota organización y control de las finanzas.

El autor, Efraín Sánchez, es consultor financiero, productor y moderador del programa de economía y finanzas Tu Salud Financiera.