Exhiben los grandes diseños de Yves Saint Laurent

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 15 años.
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Paris.- Yves Saint Laurent, el maestro de la costura, ha regresado a menos de dos años de su muerte con una retrospectiva mayor, en la que se abarcan sus cuatro décadas como el diseñador de modas cuyos diseños le dieron a la mujer mucho más que vestidos: poder.
La exhibición muestra 307 piezas de la colección del diseñador, desde sus inicios en el 1958 con Christian Dior, hasta los vestidos sueltos de chifón plisado que presentó en su última colección en el 2002.
El visitante puede caminar alrededor de vestidos con temas innovadores que aún hoy marcan la moda, desde los esmoquin presentados en 1966, hasta la opulencia del oro y las denominadas "colisiones de color", audaces coordinados de colores que ahora se ven en salones y calles de las ciudades.
El tributo a Saint Laurent, quien falleció en junio de 2008 a la edad de 71 años, abre en medio de los desfiles de la semana de la moda de París, el día que la marca YSL presenta su colección de otoño.
La muestra está ubicada lejos de las pasarelas, acomodada adecuadamente en los pasillos suntuosos del recién remodelado Petit Palais (Pequeño Palacio) del siglo 19 donde la ciudad de París tiene su Museo de Bellas Artes.
"Yves Saint Laurent es un maestro", señaló Gilles Chazal, director del Pequeño Palacio, que está ubicado en la avenida de los Campos Eliseos.
Su compañero por años Pierre Berge laboriosamente conservó todos los trabajos de Saint Laurent, incluyendo pedazos de las telas que usaba. Es la Fundación Pierre Berge-Yves Saint Laurent el motor detrás de la retrospectiva, cuya patrocinadora es la primera dama de Francia Carla Bruni-Sarkozy, quien modeló para el diseñador.
Precisamente, el vestido inspirado en el cuadro del Matisse "palomas de paz" —cortísimo, sin mangas y blanco con dos enormes palomas— que Bruni modeló en un inmenso desfile de modas al inicio de la Copa Mundial de 1998, en Francia, forma parte de la exhibición.
Algunas de las mayores contribuciones del modisto incluyen la chaqueta de safari, el vestido cruzado y los trajes de chaqueta y pantalón para mujeres, un concepto revolucionario que hoy prospera como un artículo necesario en el guardarropa de cualquier mujer trabajadora.
El poder ha sido tradicionalmente ejercido por el hombre y al adaptar "aquella ropa de hombre para colocarla sobre los hombros de las mujeres, le dimos a ellas ese mismo poder", dijo Berge.