Bad Bunny sigue cultivando su marca en el ámbito de la moda. Sin perder ni una pizca de su autenticidad, al contrario, logrando sorprender como siempre, el artista aparece desde ayer en las plataformas de la famosa revista Vogue modelando las carteras de temporada.

Piezas de marcas de lujo como son Louis Vuitton, Alexander McQueen y Loewe, la estrella de la música urbana las exhibe con llamativos diseños, en su mayoría de gran tamaño, y que también son parte de las nuevas colecciones de firmas famosas, por ejemplo, Dior, Prada y Dolce & Gabbanna. Todos los conjuntos los acompañó con los tenis Adidas que representa.

“Siempre fui un niño muy independiente”, dijo el “Conejo malo” en la entrevista que acompaña la sesión fotográfica, realizada en el marco de la reciente ceremonia de los premios Latin Grammy. “Me gustaba vestirme a mi manera, hacer mis propias cosas, hacer de mi dormitorio mi propio espacio”.

Compartió que, si por él fuera, usaría la misma ropa durante una semana, pero su amigo desde escuela superior, Janthony Olivares, se ha convertido en su conciencia en cuestión de estilo.

“Podría usar el mismo atuendo durante toda una semana si estoy solo. Entonces, cuando me visto, Janthony dice: ‘Diablo, hermano, estoy orgulloso de ti’”, relató. “Él odia cuando salgo usando lo que sea porque siempre está acicalado”.

Esa realidad cambia cuando sube al escenario, donde ha roto con patrones de género en la moda, al llevar faldas plisadas características de Chopova Lowena (para su video musical “Yo Perreo Sola”), una gabardina futurista, sacada directamente de la pasarela con inflexión de astronauta de Jun Takahashi de Undercover (para los American Music Awards del año pasado), y un sobrio traje negro de Burberry, complementado con un solo girasol vivo (para los Grammy).

“Si caminaba por un jardín y veía unas flores, las recogía para llevárselas a mi mamá”, recordó Benito Martínez Ocasio sobre su infancia. “Era un poco payaso, pero también era un poco tímido, y también me consideraba un chico cariñoso”, confesó el trapero a la publicación.

“Me encanta ir a buscar las cosas que imagino en mi mente”, fue la última cita previo a que se reseñara en el escrito que se prestaba a iniciar los ensayos para la serie de conciertos que presentó el pasado diciembre en el Estadio Hiram Bithorn.