El olor a pollo recién asado al carbón que impregna la carretera PR-155 del barrio Barahona en Morovis, atrae a cientos de transeúntes que, difícilmente se resisten a degustar la receta secreta de Maelo Chicken Fever.

Por eso, muchos lo catalogan como “el mejor pollo de Puerto Rico’, por la jugosa mezcla de sabores que se adhieren a la tierna carne blanca y que acompañan con otras delicias criollas para coronar el paladar.

El popular negocio abrió sus puertas hace más de 55 años y, desde entonces, ha mantenido el apoyo de una amplia clientela que llega desde distintos puntos de la Isla a deleitarse con la fórmula ganadora.

Su más reciente propietario, Juan Carlos Fontán Marrero, heredó la receta por manos de su suegro, Ismael Rosado Morales quien, a su vez, recibió la bendición del dueño original.

“Empecé aquí a trabajar con mi suegro, como empleado, y fui adquiriendo el conocimiento. Fue él quien me enseñó la receta del adobo que, es lo principal del negocio y ahí, poco a poco seguí con él hasta que me dijo que se quería retirar y entonces, aquí estoy yo en su representación”, reveló el hombre de 37 años.

Juan Carlos estudió mecánica, pero su pasión por la cocina se hizo más fuerte y decidió abrir un restaurante de comida criolla.

Esto ya que, a su padre, Pedro J. Fontán Nieves también “le encantaba la cocina”.

“El otro negocio era Fontán Brother’s; empezamos en la cocina y me siguió gustando. Unos días trabajaba allá y en otros, ayudaba a mi suegro en este negocio. Pero ese restaurante se le quemó la cocina en 2014. También yo tengo un ‘food truck’ con mi hermano, hace seis años”, expuso el hijo de Emérita Marrero.

El establecimiento abre de jueves a domingo y genera 16 empleos.
El establecimiento abre de jueves a domingo y genera 16 empleos. (WANDA LIZ VEGA)

El negocio de pollo asado al carbón fue originado hace más de medio siglo por Genaro Colón que, se inventó la receta del adobo.

“El negocio (Maelo Chicken Fever) ahora es mío, desde hace un año y medio. Mi suegro llevaba 33 años, pero el negocio puede estar pasando los 55 años, así como está, principalmente por dentro, porque por afuera se le han hecho mejoras, el rancho es nuevo”, acotó.

“Genaro Colón, era el abuelo de mi esposa (Yessenia Rosado). Empezaron frente a esta carretera, luego se mudaron. Estaba enfermo, era diabético y por eso, se lo dejó a mis suegros. Por eso se llama Maelo, por Ismael. Siempre se ha conocido por Maelo”, insistió.

La operación es de jueves a domingo y, según Juan Carlos, genera 16 empleos.

“Este negocio es un punto importante de Morovis. Dicen que son los mejores pollos de Puerto Rico, el secreto es la receta del adobo. Pasó de Genaro a mi suegro y luego a mí. Más nadie la sabe”, sostuvo Fontán Marrero que es padre de dos hijos.

De hecho, semanalmente, se venden entre 1,100 a 1,150 pollos.

“Compramos pollos To-Ricos. Nosotros vendemos de jueves a domingo, entre 1,100 a 1,150 pollos. Viene mucha gente del pueblo, pero también vienen de San Juan, de Caguas y de otras partes de la isla que, vienen directo a comprar aquí”, resaltó.

Pero no todo es el rico pollo, sino que “los sábados y domingos tenemos pernil asado y costillas”.

“Aquí también hacemos arroz con gandules y longaniza. Tenemos yuca, batata, guineo, amarillo y pan. Lo que estamos usando es guineo local, pero la batata amarilla viene de Santo Domingo, igual que los amarillos. Empecé con plátano local, pero a veces, había problema con la disponibilidad del producto”, lamentó.

Entretanto, la fiebre de Maelo contagia a familias completas, según Juan Carlos.

“Dicen que somos los mejores pollos y todas las personas que llegan, por primera vez, se meten para el área del horno a tomarse fotos. A ellos les gusta el calentón. Bueno, hasta los nenes pequeños se acercan a mirar los pollos”, concluyó.

Para detalles puede acceder a Maelo Chicken Fever en Facebook o llamar al 787-345-6685.