Tan pronto llega la Navidad, la dieta desaparece (o se hace muuuy difícil seguir alguna). Y es que el típico menú navideño boricua es abundante y lleno de manjares. No solo tenemos aperitivos y el plato principal de arroz con gandules, pasteles y lechón,  sino que también hay varios postres que en esta época no pueden faltar: el tembleque y el arroz con dulce y pasas son nuestros mejores ejemplos de lo que ofrecemos al mundo para después de una gran comida. 

En una que otra casa también puede encontrar el majarete, que es a base de leche de coco y se realiza más en esta época.

Pero si va a hacer desajustes, no tiene que limitarse a éstos. Hay muchas recetas y opciones de postres festivos que  puede confeccionar o comprar para darle un toque internacional a su mesa y que puede ofrecer como regalo a sus invitados. Aquí le hacemos un recuento de otras delicias que son famosas en otros países.

Turrón

Es una de esas cosas emblemáticas o que más evocan la Navidad. Su origen es de España, aunque en Italia y Dinamarca elaboran productos muy similares. Aquí las cajas de este dulce se consiguen en prácticamente cualquier panadería o supermercado. Los hay de Alicante que es duro, de mazapán que es blando o de chocolate 

Bizcocho de frutas

Hay varias versiones de este bizcocho pero se estima que su origen es romano. La versión italiana se conoce como Panettone. La otra versión famosa es el fruit cake de Inglaterra. La idea básica es la misma: remojar las frutas secas en algún licor, generalmente se usa brandy. Algunas personas hacen el proceso de remojar las frutas hasta semanas antes de finalmente incorporarlas al bizcocho.

Rosca de Reyes

Este es un bizcocho que forma parte de la tradición mexicana. Se suele esconder en la masa un muñeco del niño Jesús. Al que le toque el pedazo con el muñeco le toca pagar los el 2 de febrero.

Galletas de jengibre

Aunque los postres con jengibre datan del siglo 15, las recetas variaron según se extendían sus usos por Inglaterra y Alemania. Pero, todo tiende a indicar que la galleta en forma de persona, como la conocemos hoy en día se la debemos a la reina Isabel I de Inglaterra, quien obsequiaba a sus visitantes ilustres con galletas de jengibre decoradas para parecerse a ella. Eso sí, una vez se publica la versión del cuento Hansel y Gretel por parte de los hermanos Grimm en 1812, estas delicias se hicieron más famosas. Y claro, los más jóvenes recordarán al personaje  Jengi de la saga Shrek. 

Bastones de menta

Es muy difícil establecer su origen y hay  muchas versiones al respecto que circulan en distintos países, aunque ninguna está comprobada. Una de ellas apunta a que los bastones se crearon en Alemania. Otra versión señala que se trata de una invención que nació en Suecia, que es uno de los países donde más popular es este dulce. Mientras, hay quien dice que fue un invento para honrar la figura de Jesús quien nació libre de pecado y luego derramó su sangre, lo que explicaría sus colores rojo y blanco, mientras que  su forma de bastón buscaba ser una alegoría a que Jesús es el buen pastor que guía a la humanidad. Cualquiera que sea su origen, lo cierto es que hoy en día estos se consiguen en cualquier país.

Natilla

En esta época en Colombia y Ecuador suelen preparar una versión navideña de la natilla que es muy popular y se prepara con maicena, coco y canela, lo que recuerda al majarete boricua.

Tronco de Navidad 

También están reñidas las historias sobre su origen. Se le conoce como bûche de Noël (en francés) o Yule log. Algunos indican que el postre nació en Francia y otros indican que su origen es alemán y se usaba para conmemorar el solsticio de invierno. En lo que están de acuerdo es que en Europa es muy pedido en Navidad y lleva chocolate. La idea es presentarlo y decorarlo como si fuera un tronco listo para la chimenea. Pero en realidad cuando uno se fija bien, este postre es prácticamente lo mismo que nosotros conocemos como el brazo gitano.

Cualquiera que elija, compártalo con su familia y amigos, que es parte de la verdadera magia de esta época y de paso, la culpa de comer unas calorías extra se reparte.