“La juventud y la mujer está trayendo esperanza a nuestro país. Ojalá sean muchas más las que llenen a este pueblo de orgullo”, comentó anoche la cantante de 19 años en exclusiva a este diario.

La reina reiteró su felicidad por haber cumplido la promesa que hizo cuando partió hace más de 20 días a la competencia.

“Les prometí que les iba a dar un regalo para la Navidad”, sostuvo. 

Tras llamar a sus padres, a los que había visto sólo una hora luego de ganar,  desde temprano se reunió con la Organización de Miss Mundo para firmar su contrato. Fue sola, a pesar de que su padre es abogado, y estuvo negociando lo que será su nuevo trabajo durante el año de su reinado. Vivirá un año en un apartamento cerca de la casa de la presidenta de Miss Mundo, Julia Morley, en Londres. 

Para sus padres, verla lograr su sueño es “una experiencia que nos llena orgullo,  demostró que querer es poder”, dijo su mamá, Diana Díaz. 

Su padre, el licenciado Jesús del Valle, está feliz, pues celebrará su  cumpleaños  y el de su hija, que llega a sus 20 años, el 30 de diciembre.

Como habíamos adelantado, Stephanie sale hoy con sus padres a Nueva York, donde celebrará la Navidad. El año lo despedirá en Florida. En enero volverá a la Isla para su fiesta de pueblo. Se espera que sea recibida en La Fortaleza por el gobernador electo, Ricardo Rosselló, y su esposa, Beatriz Rosselló, quien participó en  Miss Mundo de Puerto Rico en  2007.

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