Un vistazo a Camuy a caballo
En el Potrero y Cafetería Brisas del Mar te divertirás cabalgando mientras aprecias espectaculares paisajes de campo y playa, y hasta te puedes hospedar.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 1 año.
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La emoción de escuchar el galope de un caballo mientras se deleita con escenarios naturales del campo a la playa promete convertirse en una experiencia inolvidable para aquellos que buscan una alternativa diferente en su visita a Camuy.
Para disfrutarlo no es necesario ser un experto en el arte de la equitación, pues se trata de excursiones guiadas a través del Potrero y Cafetería Brisas del Mar que ofrece recorridos por la despampanante zona a un paso relajante.
Su propietario, Raúl Vega Sierra, es un apasionado de estos animales desde que era pequeño, pues le encantaba pasear e interactuar con ellos hasta que vio la oportunidad de compartir su pasatiempo mediante una actividad que le generara ingresos.
Para ese entonces, Vega Sierra trabajaba como supervisor de distribución del desaparecido periódico El Mundo y, tras el cierre, se aventuró a tomar las riendas de su destino y crear el negocio, ubicado en unas seis cuerdas del barrio Yeguada, sector Bajura, en Camuy.
“Cuando uno es muchacho le gustan los caballos y yo tenía caballos, desde chiquito. Pensé en desarrollar excusiones a caballo. En un momento dado no tuve el apoyo de parte de la familia. Me decían que si creía que iba a vivir de esto”, contó el camuyano de 58 años.
A sus 28 años comenzó el desarrollo de una empresa con la que ha mantenido a su familia hace casi tres décadas.
“Yo quería tener mi propio negocio y empecé dando excursiones a caballo. Llevamos casi 30 años dando excursiones a caballo y cuando empecé tenía dos o tres caballitos. Así nos fuimos multiplicando y creciendo poco a poco. Llegamos a tener 26 caballos en un momento dado y ahora tenemos 12″, relató.
“Son caballos mansitos para montar personas, porque mucha gente se cree que los ponys son para montar niños porque son pequeños, pero no es así. Hay más de 100 razas de caballo y cada una tiene su uso; desde paso fino, hacer fuerza y el pony, que es un caballo de lujo, pero el boricua es un caballo de paseo”, acotó.
Destacó que las excursiones son para personas a partir de los siete años con un máximo de 200 libras de peso. Mientras que los más pequeños podrán disfrutar de paseos dentro de la finca.
“Tenemos dos distintas excursiones, todas son por carretera de campo y son por el monte, pero la más larga te lleva hasta la orilla de la playa. En ambas pueden ir niños de siete años en adelante y los adultos no deben exceder de 200 libras”, insistió.
La ruta de mayor duración es de aproximadamente una hora y media y, sale del potrero en el sector Bajura y “te lleva por toda la carretera en el campo, por toda la quebrada hasta llegar a la orilla de la playa en Puerto Hermina en Quebradillas. Allí se ve una casa hecha en piedra por el pirata Cofresí”.
“La otra ruta dura 45 minutos hasta el monte. Vemos la playa, la naturaleza, tranquilidad y, vamos relax, no es que vamos a las millas, uno detrás de otro. Es una actividad para niños desde los siete años, para gente que no saben correr caballos, y personas de 80 años que antes montaban y quieren darse una trillita, este es el lugar”, aclaró.
Asimismo, destacó que el lugar cuenta con una cafetería atendida por su esposa, Carmen Moreno.
“Empezamos con la cafetería hace 17 años, pero con el huracán María sufrimos mucho daño. Entonces, construimos la terraza de don Isidro, en agradecimiento a un amigo dominicano que me ayudó”, confesó.
Entre las alternativas gastronómicas disponibles en el lugar, “hay pechuga de pollo, carne frita, chuleta frita, chicharrones de pollo, alitas, masitas de pollo y hamburguesas”.
“También hacemos camarones al ajillo o empanados, filete de dorado, filete de chillo o de mero, asopao de pollo o camarones, quesadilla, arroz blanco y habichuelas, arroz con gandules, pernil, cuajito, viandas y biftec”, agregó.
De otra parte, mencionó que el negocio cuenta con un área para hacer camping, así como dos estructuras frente al océano Atlántico que se alquilan mediante la plataforma Airbnb. Uno de los espacios tiene jacuzzi, pero ambos cuentan con sus respectivos baños, acondicionador de aire, televisor y columpios para admirar la belleza del mar.
“Las excusiones a caballo son sábados y domingos, de 10:00 a.m. a 4:00 p.m. Es por orden de llegada y tenemos paseos por la finca para niños para que también sean parte de la experiencia”, señaló.
“Ha sido muy bueno porque hago lo que me gusta. Disfrutamos nuestro trabajo, atender la gente, tratarlos con respeto, amabilidad. Todo lo que ves aquí lo he hecho yo”, apuntó.
La operación, endosada por la Compañía de Turismo de Puerto Rico, genera seis empleos. Para detalles, puede llamar al 787-405-2229 o acceder a: Potrero y Cafetería Brisas del Mar en Facebook.