Anualmente, miles de personas provenientes de distintos rincones del planeta se allegan a la Hacienda Tres Ángeles, en el barrio Portillo de Adjuntas, para disfrutar la belleza inigualable de la zona central y aprender sobre la agricultura local.

Con una espectacular vista hacia sus montes paradisiacos, la finca de 101 cuerdas representa uno de los destinos agroturísticos más visitados debido a su oferta educativa, que comienza en el cafetal y se convierte en una experiencia interactiva que concluye con la degustación de los productos cosechados en el lugar.

Además del café, la hacienda cuenta con cultivos de china, plátano y yautía que son distribuidos a nivel comercial y, otros 15 productos destinados al consumo en las instalaciones, entre estos, guineo, chironja, limón, recao y papaya.

La hacienda cuenta con un restaurante cuyos platos varían de acuerdo a la cosecha.
La hacienda cuenta con un restaurante cuyos platos varían de acuerdo a la cosecha. (WANDA LIZ VEGA)

Aunque parezca increíble, sus propietarios Juan Luis Meléndez y su esposa Naomi Gómez adquirieron la espectacular finca en 2012 sin saber nada de siembras pues, hasta entonces, la familia contaba con negocio propio de distribución de acondicionadores de aire.

“Yo pensaba que nos íbamos a retirar del negocio, pero los planes de Dios fueron que viniéramos a trabajar la tierra. Yo no sabía con qué propósito, pero si nos mandó a trabajar la tierra, vamos a hacerlo bien y dar lo mejor de cada uno. Así llegamos a Adjuntas, ocho meses después de estar orando”, confesó el ingeniero mecánico de 56 años, egresado del Colegio de Mayagüez.

“Fue haciendo turismo interno que nos hablaron de la finca de un señor que había fallecido y la finca se estaba perdiendo. No nos dieron dirección y salimos a buscarla, pero un mes y medio después la encontramos… era esta. Salíamos a visitar distintas fincas a través de la isla, pero siempre parábamos aquí”, recordó el hombre oriundo de Caguas.

Así nació Hacienda Tres Ángeles, cuyo nombre es en honor a las tres hijas de esta pareja: María de los Ángeles, Angélica Noemí y Victoria de los Ángeles. La operación arrancó en 2013, luego de que Juan Luis comenzara a educarse sobre la industria cafetalera a nivel mundial.

“Gracias a la tecnología pudimos estudiar la economía más poderosa del mundo en cuanto a café se refiere. El café es el segundo bien que más se mercadea en el mundo, después del petróleo. Este es un proyecto de todos, aquí nada es mío, todo esto es de Dios, somos administradores en esta tierra”, aclaró mientras contemplaba la magnitud de la obra.

La hacienda se convirtió en el primer destino agroturístico certificado por la Compañía de Turismo de Puerto Rico en 2014 debido a la calidad de recorridos que realizaban, “viendo la necesidad que había en el área y queriendo poner un granito de arena y ayudar a los agricultores del área”.

“A raíz de nuestro recorrido turístico han nacido más de 100 proyectos agrícolas en Puerto Rico, muchos de ellos de personas como nosotros que no sabían de agricultura. Muchos de ellos que no sabían cómo empezar, nosotros los ayudamos”, afirmó.

Sin pretenderlo, en 2015 fueron reconocidos por la Organización Mundial de Turismo de las Naciones Unidas como uno de 28 destinos turísticos a nivel mundial.

“Eso ocurrió gracias al turismo sostenible a través de estos recorridos y la manera en que enseñamos todo lo que podemos hacer en este país, sin tener que dañar el medioambiente, utilizando al máximo los recursos. Este año, hemos tenido visitantes de Polonia, Ucrania, Egipto, gente de todos lados”, mencionó.

“El recorrido es puramente educativo. La idea es que cualquier persona salga con la conciencia, visión, oportunidad y con la mente clara de que la agricultura es para todos los puertorriqueños”, esbozó.

El recorrido -que se realiza los sábados- tiene duración de hasta tres horas y termina en el centro del visitantes, donde hay un ‘coffee shop’ y un restaurante que en conjunto con la finca genera cerca de 20 empleos. Su terraza acomoda hasta un centenar de personas.

“En nuestro ‘coffee shop’, hay disponible café fresco y bizcochos hechos en casa con productos de la finca. Tenemos el restaurante con un menú de seis platos que varía cada cierto tiempo. Ahora tenemos asopao de gandules con churrasco picadito y bolitas de plátano, filete de dorado con mojo isleño y mofongo de plátano verde o maduro”, detalló.

Sobre el café, dijo que “nos hemos enfocado en seis marcas privadas para el mercado de Estados Unidos. Salen con nuestro producto y ocho marcas privadas para el mercado de Puerto Rico. Todo es con producto 100% de Puerto Rico”.

Para detalles: 787-360-0019.