El cantante Tito Nieves se despidió hoy, sábado, del Centro de Bellas Artes de San Juan con el concierto Mi vida musical, con el que también celebró 37 años de trayectoria artística.

 El llamado “Pavarotti de la Salsa” estableció que se retira de dicho escenario, pero “no del canto”. Y lo demostró no solo con palabras, sino con su voz, con la que provocó puro movimiento entre el público al interpretar 24 canciones, en la primera de dos funciones de su gran festejo musical.

Tito Nieves demostró una vez más su dominio escénico, su carisma y su gran talento vocal al interpretar por dos horas, éxitos como Fabricando fantasias, I Like It Like That, El piragüero y Que seas feliz.

La primera función, que se celebró a las 7:00 de la noche  -la segunda sería a las 11:00-, se llevó a casa llena con la asistencia de un público que no dudó en aplaudirle y gritarle al cantante, el cual cumplió con su promesa de interactuar con la audiencia, mostrándose conversador y bromista.

Mi vida musical arrancó directo y al grano. Luego de la tercera llamada, subió el telón y ahí ya estaba Tito Nieves en el centro del escenario para cantar Por estoy contigo. Una gran pantalla, ubicada detrás de la orquesta de 14 músicos, y un cuerpo de baile dirigido por el bailarín Tito Ortos, fueron los elementos visuales del evento en el que Nieves no perdió tiempo. Estaba claro que estaba ahí para cantar y así lo hizo con las canciones Eres linda y Más que tu amigo, segundo y tercer tema de la velada.    

“Buena noches, Puerto Rico, buenas noches. Están llegando un poco tarde y yo que estoy aquí desde las 12:00 del mediodía con un frío”, saludó el artista, quien luego se quejó con los sonidistas porque no escuchaba a su orquesta.

“Este público se merece lo mejor y esto no fue lo que ensayamos. Mira que hoy yo me despido de este escenario. ¿Se oye bien?, ¿se oye bien?”, continuó el salsero en broma y en serio,

y siguió con un medley de salsa. El público seguía llegando cuando el vocalista cantó el éxito Fabricando fantasias, en la que se proyectaron fotos del fenecido hijo de Nieves, a quien está dedicado dicho tema. El intérprete le quitó un poco de dramatismo a la canción al interactuar con el público, bajando del escenario y regañar en broma a aquellos que llegaron tarde.  También se tomó fotos con los fanáticos, mientras seguía cantando.

Para el sexto tema de la noche, un niño apareció en el escenario con la excusa de que se había perdido para ir al baño. Claramente se trataba de un montaje que sirvió para despistar al salsero y sorprenderlo con un vídeo en que su familia le enviaba saludos desde Nueva York.

“Yo digo que la fama no vale nada. Lo más importante es la familia y yo, gracias a Dios, que tengo a mis viejos vivos, quienes llevan 60 años de casados. El otro que vieron es mi hijo Tito, de 17 años. Gracias por aguarme los ojos y espero poder cantar porque tengo un taco en la garganta de madre”, manifestó para enseguida vocalizar Que seas feliz.

El concierto se trataba de celebrar los 37 años de carrera de Tito Nieves por lo que no faltó un medley de canciones de cuando el vocalista formó parte de El Conjunto Clásico, como El piragüero y Panadero.

Pero no todo fue cadencia, Tito Nieves no olvidó el romanticismo al cantar el bolero Mírame más con el que la audiencia suspiró y con el que aprovechó para darle un beso de piquito a su prometida, JanetteFigueroa.

Tampoco se le pasaron esos clásicos de su repertorio como El amor más bonito, una de las que el público cantó de principio a fin, así como De mi enamórate.  

Una buena dosis de macharranería no se podia quedar afuera, como cuando el vocalista destacó que “los hombres somos mentirosos por naturaleza y ustedes, las mujeres, mientras más preguntan, más hacen que nosostros digamos mentiras”. Esto para darle paso al tema Manía.

Antes de seguir con su concierto, el intérprete le cedió el turno al grupo de voces Nova Vibra, cuya actuación sirvió de intermedio musical para que Tito Nieves se refrescara y regresara con otros nueve temas, entre ellos No me queda más, Señora ley, Sonámbulo  y 

I Like It LikeThat -en versión batucada-, con la que cerró una gran noche musical, que lejos de ser una despedida pareció el  inicio de una nueva faceta artística para este cantante que todavía puede afirmar que es el Pavarotti de la Salsa.

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