A eso de las 4:30 de la tarde de hoy, la familia de Cheo Feliciano se dirigió a los presentes para expresar su agradecimiento por el amor y apoyo al artista durante su carrera, así como por estar acompañándolos en el velatorio.

La viuda, Socorro "Cocó" Prieto, rodeada de sus hijos y nietos, expresó desde el podio, cerca del féretro, que "gracias por querer a mi amado esposo".

"Es difícil cuando estamos en una situación como esta. No es fácil ver al hombre que amas, que me dio a mis hijos y a mis nietos... (en una caja)",  añadió.

Tras 56 años de matrimonio, Prieto indicó que "en los momentos más difíciles de Cheo Feliciano yo estuve allí a su lado. Conocí a Cheo cuando yo tenía 15 años y el 19. Me robó de la cuna, como el decía". 

Tuvieron tres varones y una hija.

Repasó brevemente la historia del salsero y bolerista que batallaba contra el cáncer, en cuanto a sus tropiezos con las drogas y cómo se levantó con el apoyo de los Hogares Crea.

"El día que le tocó (partir de este mundo) salió del casino, se me durmió y se me fue", expresó con tristeza.

Habla uno de sus hijos

En tanto, José Luis Feliciano, uno de los hijos de Cheo Feliciano, manifestó al lado de su madre que "esto es algo grande, el desborde del cariño de un pueblo que mi padre amaba con todo el corazón".

"Él fue el 'Niño mimado de Puerto Rico'. En lo físico no está, pero está en la gloria del Padre y en algún momento lo volveré a ver", acotó.

Con orgullo agregó que "mi papá fue un hombre de fe, de amor y dado al pueblo".

"Cheito, Richie y Michel, yo sé que el amor de él reinará sobre todos nosotros", expuso. 

José Luis reveló que al igual que su procreador cayó en las redes de las drogas, pero se levantó con su apoyo. Luego entonó el bolero popularizado por su padre, "Amada mía" pero en la entonación "Amado mío".

Previo a que la familia hablara con los presentes, la nieta de Cheo Feliciano, Mía Michel, de 12 años, cantó una canción en inglés y tocó el piano.

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