René Pérez estrena hoy "Así de grandes son las ideas"
El origen de este vídeo-arte orgánico se asemeja con el nacimiento de Calle 13, hace ya nueve años.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 11 años.
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El cortometraje “Así de grandes son las ideas” de René Pérez Joglar, mejor conocido como Residente de Calle 13, y el animador Quique Rivera Rivera, estrenó hoy en el canal de YouTube elvecindariocalle13.
Según un comunicado de prensa, el origen de este vídeo-arte orgánico se asemeja con el nacimiento de la banda puertorriqueña Calle 13, hace ya nueve años, porque ambos surgieron de una necesidad y una idea, que inicialmente pareció descabellada para muchos, pero que logró trascender.
“Me divertí durante todo el proceso, porque logré transportarme a mis comienzos como animador en la escuela de arte”, dijo Pérez Joglar.
Pérez Joglar hizo su bachillerato en Bellas Artes en la Escuela de Artes Plásticas de San Juan y completó una Maestría en Bellas Artes con concentración en animación, del Savannah (SCAD) en Georgia. Además, como parte de su proyecto de tesis, trabajó el cortometraje, S=emp2 (Sexo = Energía Masa Placer al cuadrado), el cual presentó en una competencia en Madrid, España, alcanzando el 2do lugar. También es el autor de los conceptos para los vídeos musicales de Calle 13 y es parte integral de todo el proceso de realización.
“Quique es el mejor animador en stop motion que conozco, por eso fue un privilegio realizar este proyecto juntos. El método que utilicé para escribir la letra del tema fue el mismo método que utilizo para escribir guiones y cuentos. Lo más divertido del proceso fue ver cómo Quique le iba dando vida a estas letras de manera artesanal, convirtiéndolas en algo físico”, añadió.
La canción en animación dura cinco minutos, su realización requirió 70 días de filmación y el producto final está compuesto por más de 7,200 fotografías.
¿POR QUÉ UNA CANCIÓN EN ANIMACIÓN?
Según la comunicación escrita, en el 2011 Quique Rivera había sido aceptado al programa de maestría en animación experimental del California Institute for the Arts. Fue entonces cuando se le ocurrió la idea de proponerle a Pérez Joglar trabajar juntos en un vídeo animado, para una de las canciones del disco “Entren los que quieran”.
¿CÓMO SE HIZO?
El proceso completo de creación del personaje del cortometraje duró nueve meses y la animación fue realizada mediante la técnica de stop motion, un proceso laborioso que se realiza colocando una cámara fija en un trípode y fotografiando un objeto estático, se explicó. Luego de tomar una foto, el animador altera ese objeto y toma nuevas fotos, repitiendo el proceso cientos de veces. Al proyectarse de manera rápida y consecutiva (24 fotos por segundos), se crea la ilusión de que el objeto se movió por cuenta propia.
Pérez Joglar explicó que quería escribir “una canción diferente, algo extraña”, con valores cinematográficos y concebida para una pieza visual.
(Suministrada)
Finalmente, el intérprete fue definiendo la personalidad del viejo sabio del vídeo, detallando qué lo motivaba, en qué lugar-tiempo-espacio vivía, y qué atributos físicos tenía que le permitirían sobrevivir al fin del mundo. Se logró así un personaje con características físicas similares a las de otras especies: la longevidad de la tortuga de Islas Galápagos –cuyo metabolismo hace que sus órganos vitales no se deterioren–, la lengua del camaleón que es la más larga y el olfato más agudo que lo posee la oruga, se informó.
Además, para la fabricación del personaje, Rivera esculpió en plasticina la cabeza y el torso del viejo sabio; luego las manos y finalmente las piernas, construyendo así 16 moldes de resina sólida del personaje, que rellenaría con silicón, para lograr la expresividad de movimiento que buscaban. El esqueleto consistió de una estructura interna con coyunturas, realizada con alambre, hilo y resina de epoxi, que le brindaría la flexibilidad y tensión necesarios para sostener con precisión al personaje.