Los aguaceros y fuertes ventiscas, no apaciaguaron la noche del sábado los ánimos del afamado cuatrista Enrique “Quique” Domenech y Sonido Tré ni del público que se congregó en la concha acústica de Guaynabo, que con paraguas y capas disfrutó del concierto “Legado”.

El cuatrista y los cantantes del grupo, Mayda Belén y Edgar Ríos deleitaron empapados a la audiencia que se mantuvo por casi dos horas bajo la lluvia escuchando un variado repertorio que culminó con un medley navideño.

“Solo puedo dar gracias, a Dios por permitirnos presentarnos ante toda vicisitud. Gracias a un pueblo que nos sigue queriendo a pesar de la distancia”, expresó un emocionado Domenech, quien agradeció el respaldo de la gente.

Algunos cargaron con sillas plegadizas y otros se acomodaron en asientos frente al auditorio guaynabeño al aire libre. En primera fila con un paraguas estaba el alcalde del pueblo, Ángel Pérez.

Durante el espectáculo, una representación del Hospital del Niño, agradeció a Domenech por el apoyo que el artista le ha brindado por 15 años a la institución benéfica.

“Gracias a todo el personal por hacer este concierto posible, músicos, sonidistas, técnicos, luminotécnicos, y la producción del evento”, sostuvo Domenech y también agradeció a los auspiciadores del concierto. 

El reconocido cuatrista y su esposa Mayda ofrecieron este primer concierto en suelo borincano tras haberse mudado hace tres años a Orlando, Florida, en busca de nuevos horizontes. Originalmente el concierto fue pautado para el Centro de Bellas Artes de Caguas y tras ser cancelado, Quique Domenech, con la ayuda de auspicios, logró llevar al público la oferta musical libre de costos. 

Curiosamente, el músico recibió la noticia de que su concierto en Bellas Artes era cancelado por falta de venta de boletería, días después de haber criticado en las redes sociales la petición que hizo el gobernador Ricardo Rosselló a Bad Bunny, para que realizara una tercera función en el Coliseo de Puerto Rico.