Natti Natasha admira aún más a Raphy Pina en su rol de papá
Dice ser su apoyo absoluto en el caso federal que enfrenta el productor.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
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Natti Natasha ya admiraba el rol de padre de su pareja Raphy Pina, pero al verlo de cerca, mimando a la hija de ambos, su amor por él es aún mayor. A eso le suma que el parecido físico entre el productor y la bebé, Vida Isabelle, es “ridículo”, según descrito por la misma estrella femenina de la música urbana, que este viernes presenta su segundo álbum inédito, “Nattividad”.
Es un proyecto discográfico de 17 canciones bajo el sello Sony Music que recoge esta nueva etapa que experimenta la artista en el plano personal y musical, y que como bien establece el título, representa un nacimiento como mujer, cantante, madre y compañera sentimental. “Nattividad” es también la combinación de los nombres de ella y su hija.
“Siempre decía, ‘Él es un excelente papá', pero con una recién nacida hay más estrés, porque estamos ambos conociendo a la bebé, y es excelente. Él le dedica tiempo, él se emociona, está enamorado, enamorado de la bebé y por esa misma razón, me ayuda muchísimo”, compartió Natalia Gutiérrez por videoconferencia.
“Es un excelente padre, aparte de excelente manager; su etapa como papá siento que hasta uno llega a admirarlo más. No como pareja, sino simplemente admirar su rol de papá, y uno llega a quererlo más por eso”, sostuvo sobre su prometido, padre de otros tres hijos.
La pareja se comprometió el pasado febrero mientras vacacionaban por la zona turística de La Parguera, en Lajas.
La voz de “Ram Pam Pam” junto con Beky G espera que el anillo que le regaló entonces termine en una boda.
“Espero que sí. Hemos hablado de hacer algo tranquilo. Como hacemos tanto evento grande, ese sería algo muy personal y tranquilo, donde no tenemos que planificar tanto, sino que vamos, lo hicimos y lo gozamos. Digo que donde haya mucha comida y mucha bebida, estamos bien”, anticipó.
Llegado a una etapa de mayor madurez en la relación sentimental, Natti Natasha está convencida de que hizo bien al unirse a la persona que lleva las riendas administrativas de su carrera. “Al principio decían, ‘No es muy bueno trabajar con la persona que estás saliendo’, pero a mí personalmente siento que es todo lo contrario, porque la realidad es que para mi tipo de trabajo, mi tipo de carrera y la carrera de él, siento que una persona que no esté dentro de este mundo, no lo entendería”.
Para no afectar su vida familiar, tiene una regla, o “ley” básica: “Cuando se entra por esa puerta, todo es familia”, dijo. “Eso es lo que nos ha ayudado mucho y de esa manera hemos balanceado, aparte de que desde el principio, respetamos mucho eso”.
Esa complicidad y respaldo se extiende a lo bueno, lo malo y lo regular que les afecte cada a uno, incluyendo el proceso de juicio que enfrentará Pina en octubre por un cargo de posesión ilegal de armas de fuego y otro de posesión de un arma automática. “Siento que soy su apoyo y él es el mío, y eso es lo importante siempre”, afirmó.
La maternidad le gana un amor desconocido
Natti Natasha todavía no encuentra las palabras que mejor describan el amor que despertó una vez vio nacer a su hija.
“Por más que te lo expliquen, no lo vas a entender hasta que no seas madre. Uno antes era muy yo, yo yo, o yo y mi trabajo, y ahora es la bebé primero, y es satisfactorio. Me gusta arreglarla a ella primero, verla tranquila. La salud es lo primordial para mí, siento que si eso está bien, el mundo completo está bien”, manifestó sobre la experiencia. “Ese intento de madre cuando sale, no hay para nadie”.
Vida Isabelle es una versión femenina del padre. “Es una cosa ridícula, es algo muy obvio”, reconoce la mamá, lamentando que de ella solo tiene una manchita en el cuello. En personalidad, tiene de ambos. “Puede ser una buena mezcla entre su padre y yo”, aseguró.
“Nattividad” es una invitación a la fiesta, al perreo y a botar las penas bailando. Se presentará el viernes en el mercado digital con el sencillo “Imposible amor”, que logra el deseo de la artista de colocar su voz junto con su colega en el género urbano, Maluma. El disco fue producido por Edgar Barrera, Luny (dúo Luny Tunes), Dímelo Flow, DJ Luian y Mambo Kingz.