El rapero y compositor Myke Towers lanza hoy su álbum Lyke Mike. Este resurgimiento del trap encuentra a Myke volviendo a encender una secuencia más valiente y menos comercial. Intencionalmente diseñado para reavivar con el trap latino, el proyecto destaca al joven intérprete regresando a sus renombradas raíces de una entrega pura y acompañada con juego de palabras. Para lograr esto, Myke lleva a sus oyentes de regreso a donde tuvieron lugar gran parte de sus sueños y composiciones: la cancha de baloncesto.

Un juego de referencias, el título Lyke Mike es una especie de homónimo que honra el baloncesto, el barrio y los proyectos de vivienda pública, al mismo tiempo honrando la importancia icónica de Michael Jordan en el deporte y el arte de Myke en la música. Barrios en cualquier ciudad de costa a costa, continente e islas del Caribe dan a luz a jóvenes brillantes, atléticos y talentosos; que frecuentemente se encuentran asumiendo su grandeza musical y deportiva en las canchas de baloncesto, ya sean competencias de baile callejero, un juego de pelota o una batalla de rap.

Filmada en colaboración con el legendario fotógrafo del hip-hop Jonathan Mannion (DMX, Jay Z, Nas), la portada del álbum coloca al distinguido rapero frente a la casa de su infancia en Quintana, Puerto Rico, anunciando su regreso a casa con una entrega lírica y de raíces.

“Este álbum, para mí, como todas mis otras obras, es muy personal. Quise volver a mis raíces artísticas con el flow más trap, más calle, de donde vengo y con las influencias de mis ídolos. Las letras vienen con el mismo corazón que le ponía cuando comencé con esta aventura.”, comentó Towers en declaraciones escritas.

Citando el legendario número de camiseta de Jordan, el proyecto de 23 temas encarna una narración de la pobreza a la riqueza del rapero. Myke expresa este punto de vista en Cuenta, donde describe las diferencias nítidas entre su pasado y presente, mientras celebra el cumplimiento de sus logros. En Burberry, el rapero junto con Ñengo Flow demuestra su capacidad de crear música que resuene tanto en el público global como en el de una cultura específica.

En Mírenme ahora, las masas escuchan a un Myke presente, el exitoso rapero que vive lujosamente, creando sin esfuerzo éxitos que encabezan las listas y mirando hacia atrás en su trayecto. Estos temas viven en canciones como Lo invertí, con Miky Woodz. Jon Z se une a Balas locas, donde los raperos intuitivos montan versos fuertes influenciados por el trap, con un tempo veloz y melodías oscuras.

Con Lyke Mike, el rapero ilustra a un Myke complacido y festivo, que se siente agradecido de forma humilde, contando sus bendiciones pero orgulloso de su capacidad para seguir siendo la misma persona, independientemente de la fama. Su método natural de la producción junto con ritmos agudos y un estilo ecléctico agrega textura al álbum y es deseable para una amplia gama de oyentes.

Como narrador, se tomó en serio su responsabilidad social como rapero. El julio pasado, lanzó Michael X, un tema que muestra respeto por el movimiento Black Lives Matter, el líder civil que provoca reflexión, Malcolm X, y el fallecido George Floyd. Además, la pista habló sobre su experiencia personal como afrolatino, las injusticias sociales, el racismo sistémico y la política en Puerto Rico. Abriendo con “Soy parte del problema si no comparto este tipo de canciones”, convirtiéndolo en uno de los pocos que habló sobre el tema en la música latina. Por esto, fue nombrado uno de los artistas de la clase #YouTubeBlackVoices de YouTube del 2021.

En 39 canciones en las listas de éxitos este año, Myke es uno de los raperos más solicitados del movimiento. Colaborador entre los nombres más importantes del género, ha trabajado con artistas como Bad Bunny, Wisin, Cardi B, Farruko, Maluma, Piso 21, Sech, Yandel, Anitta, Selena Gómez, Becky G, Amenazzy y Arcángel, por nombrar algunos.

Lyke Mike sigue los pasos de su último EP Para mi ex con el que concluyó la década.