Viene a lucirse con su propio estilo musical.

El intérprete salsero puertorriqueño Moa es consciente de que las comparaciones con su papá, el cantante Jerry Rivera, serán inevitables. No le molestan, y más teniendo en cuenta su legado y la popularidad que alcanzó en la década de 90, realidad que lo hace sentir orgulloso. Pero se muestra completamente confiado en demostrar su talento artístico con su identidad particular.

“Dentro de todo yo vengo a traer mi propio estilo. Él tiene su propio desarrollo musical, los artistas que le gustan, y yo tengo los míos”, sostuvo el cantante, quien promueve su versión del tema Tocando fondo, canción original de Mario Domm (Camila) estrenada hace cerca de dos décadas en la voz del cantante Kalimba.

“Las comparaciones físicas, las comparaciones de la voz, de la música, de las producciones, de los éxitos, todo va a estar ahí, pero pienso que al final del día el viejo mío es el salsero más grande de la historia”, manifestó con ilusión en entrevista telefónica desde Orlando, Florida, donde reside.

“Yo nunca voy a poder igualar lo que hicieron los artistas de los 80, de los 90. No tengo planes de pasarle por el lado a nadie numéricamente. Solamente estoy compitiendo conmigo mismo y por ahora la aceptación del público ha sido supertremenda”.

Su padre, además de un mentor, es un cómplice en sus aspiraciones.

“Él ha sido mi maestro. Cuando yo era chiquito, él iba al gimnasio y me llevaba con éI, me llevaba a la barbería. Desde chiquito yo no suelto a ese hombre. Ando con él. Yo no lo veo como Jerry y él no me ve como Moa. Nosotros somos mejores amigos y relajamos como si tuviéramos 15 años todavía hasta el sol de hoy. Él me enseñó todo”.

Antes de probar suerte como solista, en 2017 Moa intentó impresionar en la industria de la música a dúo junto con su hermana Zeila.

“Duramos como por dos años y después nos cayó la pandemia encima, después que habíamos lanzado unos números urbanos que estaban buenos. Estábamos apenas empezando a viajar. Después mi hermana tomó su rumbo, su camino. Quiso ser mamá. Gracias a Dios ahora tiene dos hijitos superhermosos, y yo me fui por mi lado”, afirmó Gerardo Rivera Donis, padre de un niño de 11 años.

Ahora Moa, de 29 años, se enfoca en dejar su propia huella. Tras estudiar producción de filmación en la Universidad de Full Sail, y graduarse de artes culinarias en Le Cordón Bleu, ambos en Florida, el cantante apuesta a su compromiso por hacer realidad una aspiración profesional que comenzó a sus 22.

“Compuse mi primer tema a los 16 y cantaba desde pequeño con mi papá. Me sentaba con él horas y horas a cantar solamente una canción y me obligaba a cantarla hasta que yo la dominara, así fuera de José Feliciano, de Cristian Castro. Después que me gradué de la universidad, que me divertí, que estudié producción de filmación, que es uno de mis carreras secundarias, dije ‘estoy preparado para la música’. Obviamente llega un punto donde tienes que tener madurez en la vida para hacer un tipo de decisión como ésta porque no cualquiera se puede lanzar a la industria de la música sin madurez. Cuando consideré que estaba preparado para todo, me lancé”.

El género urbano le atrae, pero la salsa es la que pesa en su interés por ahora.

“Siento que al mundo le hace falta la salsa. Ahora mismo hay un hambre de salsa bien fuerte, hay mucho espacio ahora mismo. El género urbano se ha quedado con todo y es un género que también me encanta. He hecho algunas canciones urbanas en el pasado”, dijo sobre su experiencia a dúo con su hermana. “Pero el espacio en el género urbano es un poco limitado en cuanto al negocio, musicalidad, todo. Siento que la salsa me cae perfecta. Siempre ha sido mi sueño grabar salsa y más como solista”.

Fusionar con ingredientes del hip hop y R&B, géneros que le atraen desde la adolescencia, formarán parte de su estilo en el ritmo salsero.

Al indagar sobre la razón para su nombre artístico, se limitó a responder que la compartirá en un futuro. “No puedo por ahora decir, pero algún día lo voy a poder decir. Pero a mí me dicen Moa desde que yo soy pequeño, desde que tengo 10 añitos. Sí te puedo decir que era un sueño que tuve cuando era chiquito”.

Lo que sí revela es que cantar no es la única meta que tiene a nivel artístico. Actuar se añade a su lista de sueños profesionales.

“Me interesa muchísimo”, confesó con marcado énfasis. “Me encantaría y como me crié en Estados Unidos desde los 13, tengo el inglés bastante dominado, así que me encantaría formar parte de alguna producción en Hollywood. A mí la actuación desde pequeño me fascina”. Dentro de la experiencia fílmica, ha laborado en la producción y dirección de videos musicales, entre otros proyectos.

Por ahora, sigue primero en su lista el enfoque musical.

“Mi equipo está trabajando en cerrar, gracias a Dios, la gira que estamos teniendo de aquí hasta el enero con fechas de conciertos en vivo dentro de Chicago, Puerto Rico, Sudamérica, Orlando, Miami. Mi meta mayor es lanzar el disco para que la gente se ponga a gozar ya con un elemento supernuevo que quiero incorporar”, expresó entusiasmado sin adelantar la fecha para el lanzamiento.