El coliseo Guillermo Angulo, de Carolina, acogió este Viernes Santo a miles de almas que llegaron hasta esa instalación deportiva para escuchar el testimonio que ofrecieron los exreguetoneros Héctor Delgado, Christian Ponce, Julio Ramos y Jomar Quiñones en el evento evangelístico “De la tarima al altar”.

La velada religiosa atrajo personas de todo tipo, desde las más devotas hasta ciudadanos que buscaban un cambio en su vida. También llegaron personalidades como el baloncelista de los Cangrejeros de Santurce en el Baloncesto Nacional Superior (BSN), Antonio “Puruco” Latimer; la cantante Glory, conocida por el número “La popola”; y la boxeadora Kiria Tapia.

Entre los ciudadanos particulares que se dieron cita en la actividad, estuvieron Milagros Rivera Mateo y Margarita Rivera Pérez, quienes llegaron desde Santurce a escuchar a los cuatro predicadores.

“Vine aquí invitada por ella (Margarita Rivera Pérez). Es la primera vez que vengo a una actividad así. Yo soy cristiana y vine a escucharlos. Es un evento muy bonito”, apuntó Rivera Mateo.

A su lado, Rivera Pérez señaló que había llegado porque quería un cambio en su vida. “Yo quise venir aquí porque yo quiero que el Señor me cambie y para escuchar su palabra, las oraciones y los testimonios”, apuntó la mujer que llamaba la atención por sus tatuajes y pantallas.

Con un dejo de emoción en su voz, la mujer añadió que quería que Dios obrara a favor de su salud y de su familia. “Yo estoy apartada de la religión. Yo quiero que el Señor me haga un cambio hoy mismo, y yo tengo fe en Dios, en que el Señor me va a cambiar porque lo estoy pidiendo de corazón”, acotó.

“De la tarima al altar” comenzó cerca de las 7:15 p.m. con las presentaciones de las cantantes July Ann Alvarado y Jossy Concepción ante un público que llenó a capacidad las gradas del Guillermo Angulo. El auditorio, que en todo momento se mantuvo animado, acompañó a los predicadores en sus glorificaciones.

De hecho, durante la predicación se informó que debido a la cantidad de personas que llegaron hasta el coliseo, el mismo tuvo que ser cerrado. Las personas que no pudieron entrar, pudieron ver la predicación a través de unas pantallas que se colocaron en las inmediaciones del coliseo.

El primero de los cuatro exreguetoneros en aparecer en la tarima fue Delgado, quien se dio a conocer en el ambiente artístico como “El Father”. Con el mismo carisma que lo caracterizó durante su carrera musical junto a Tito “El Bambino”, Delgado instó a los presentes a cambiar el “método” con el que buscan la felicidad.

Para esto, el excantante citó el capítulo 5, versículos 25 al 29, del Evangelio según San Marcos donde se habla de una mujer que por 12 años sufrió de flujo de sangre sin que ningún médico pudiera dar con la fuente de su aflicción médica. En cuanto la mujer se entregó a Dios, “la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote”.

“No puedes buscar fuera de Dios. Hay que cambiar de método. Puerto Rico tiene que cambiar de método. El método de Puerto Rico es el dinero y tiene que cambiar”, declaró Delgado, quien se convirtió hace siete años.

El predicador también dijo que cuando él estaba alejado de Dios, sentía que su vida estaba vacía. Asimismo, apuntó que su matrimonio estuvo a punto de fracasar porque tanto él como su esposa buscaban respuestas en lugares equivocados, como la lectura de las cartas.

El segundo sobre la tarima fue Ponce, que se dio a conocer como “El Sica”. El joven, que continúo la prédica de Delgado, recordó que se crió en “los caminos del Señor” pero se alejó porque quería ser famoso.

“Como todo joven, puse mi mirada en las personas que poseían muchas prendas y cosas caras y en el reguetón, que es una música que es una mala influencia para los jóvenes, y los tiene matándose en las calles”, manifestó.

En un momento de su predicación, Ponce mencionó a su excolega Cosculluela, por quien pidió oración (al igual que para todos los reguetoneros) para que busquen a Dios.

“Puerto Rico, la solución está en Cristo”, cerró el hombre.

Ramos fue el siguiente en dirigirse a los presentes. El excantante, que se dio a conocer como Julio Voltio, también indicó que todo lo que tenía, no llenaba su corazón. “Yo tenía dinero, carros, prendas, viajes privilegios sociales… ¿Pero de que vale ganar toda la tierra, si vas a perder el alma al final?”, puntualizó Ramos.

El excantante, que llegó a grabar con el grupo Calle 13, contó solía practicar la brujería. “Los brujos no existen, son demonios. Los demonios no son buenos, son mentirosos”, dijo Ramos, quien agregó que su matrimonio también estuvo al borde de fracasar.

El último en ofrecer su sermón fue Quiñones, antes conocido como “El Caballo Negro”. El exartista, que continuó con el tema del cambio de método, expuso que él no conseguía sentirse  feliz no empece a que tenía las tres F: fama, fortuna y faldas.

“Yo también estaba enfermo como la mujer del Evangelio según San Marcos. Ella se puso en manos de los médicos y el dinero y yo con las tres F: famas, fortuna y faldas”, acotó Quiñones antes de comenzar a danzar sobre el escenario.

El evangelista manifestó que su conversión se dio el 23 de septiembre de 2011, cuando no aguantó más el vacío de su vida. “Un ministro me dijo: ‘Cánsate’. Ahora es mi tiempo de predicar. Lo que hacemos ahora, lo hacemos para la gloria del Señor”, puntualizó.

La jornada culminó pasadas las 10:00 p.m. con Delgado orando por los presentes, muchos de los cuales se movieron al tabloncillo para estar más cerca de los predicadores. Como suele suceder en estos eventos, muchos terminaron temblando mientras otros lloraban.

El evento “De la tarima al altar” se repetirá hoy, sábado, en el estadio Centroamericano José A. Figueroa Freyre, en Mayagüez.