La tan esperada presentación del legendario grupo australiano de rock ACDC en la Isla, parece haber sobrepasado las espectativas de las miles de personas que llenaron el Coliseo José Miguel Agrelot el sábado en la noche, según los comentarios de sus fans en las redes sociales facebook y twitter.

El espectáculo comenzó a las 8:30 de la noche, con el grupo boricua gótico de música metal progresiva, Mil Muertos, los que fueron escogidos por votación de los fans de ACDC para abrir el concierto y sentaron la pauta de lo que sería una noche innolvidable para los seguidores del rock en Puerto Rico.

Bajo los acordes de "Rock 'N Roll Train" de su cd Black Ice, la inmensa pantalla en el centro del escenario proyectó una animación de un tren que se desplazaba sin control mientras una caricatura de Angus Young, guitarrista principal de la banda, alimentaba la caldera de la máquina que terminaría estrellándose contra la pantalla dividiendola en dos, para enseñar un gigante tren que surgía entre explosiones, fuegos artificiales y humo.

"Disculpen mi español no es muy bueno pero si hablo el idioma del rock and roll", dijo Brian Johnson, cantante principal de la banda tras una ovación, de inmediato comenzó a escuacharse "Hell Ain't A Bad Place To Be" de su cd Let There Be Rock del 1977, seguida de "Back In Black" himno rockero de los años '80.

Un espectacular juego de luces y un impeccable sonido se resaltaban en las canciones "Big Jack", "Dirty Deeds Done Dirt Cheap", "Shot Down in Flames". De igual forma impresionó el tiro de cámara por debaja del escenario a través de un piso de acrílico donde los fan pudieron apreciar el estilo peculiar y distintivo de Angus de tocar su guitarra en la canción "Thunderstruck".

El concierto llegó a su pico con la canción que da nombre a la más reciente producción de ACDC, "Black Ice" y "The Jack", donde Angus aprovechó para despojarse de su ropa y enseñar las letras del grupo en su ropa interior. El sonido de una gran campana que bajó del techo del Choliseo fue la introducción para la canción "Hells Bells" y Shoot To Thrill ambas del cd Back In Black.

El grupo interpretó magistralmente sus conocidas canciones "War Machine", "Dog eat dog", "You Shook Me All Night Long" y "TNT", pero para "Whole Lotta Rosie", presentaron una monumental muñeca inflable encima del tren que parecía contonearse con la música y servía de antesala a un espectacular solo de guitarra de Angus Young en "Let There Be Rock enmarcado por visules que recorrían la trayectoria del grupo y donde Young hacía alarde de su estilo inigualable de tocar con una sola mano mientras señalaba al público con la otra.

Para cerrar la noche espectacular fue suficiente"Highway To Hell" y "For Those About To Rock" las cuales dejaron complacidos a los rockeros de varias generaciones que por primera vez en la Isla saborearon el heavy metal de uno de los más emblemáticos grupos de rock de la historia.