Las cortinas del escenario del Centro de Bellas Artes de Caguas no habían subido cuando el público, al escuchar la voz de Danny Rivera fraguando con sus músicos una serenata, se alborotó y con sonoros aplausos aclamaron su presencia.

De inmediato, a las 8:35 p.m., apareció el veterano vocalista elegantemente vestido, con un traje color vino y su acostumbrada bufanda, en esta ocasión color amarilla, iniciando su presentación.

Dirigido por Carlos “Pachito” Vega, y acompañado por siete músicos y dos coristas, Rivera inició su romántico concierto que dedicó a las madres como antesala a la celebración del día que las conmemora.

Una noche más, Tú y mi canción, Mujer abre tu ventana, Balconcito de San Juan, Los aretes de la luna y Te llegará una rosa, fueron las primeras canciones con las que Danny -además de demostrar que conserva su voz con impresionantes registros de tenor- enamoró y envolvió al público en un romántico viaje que duró más de dos horas.

“Gracias por estar aquí y apoyarme. Siempre que tengo una presentación me da un cosquilleo en el... y me preguntó, ¿vendrán a verme?”, expresó en sus primeras palabras al público presente, que contestó con gritos entre los que se escuchó: “siempre te vamos a apoyar”.

Ante el respaldo de sus seguidores, el cantante, de forma jocosa, ripostó que, “no sólo Bad Bunny tiene seguidores”.

El concierto de Rivera, además de sus bellas canciones, estuvo enmarcado de romanticismo, finos detalles para las féminas presentes, a quienes se les obsequiaron rosas rojas y amarilla, majestuosa decoración en el escenario con una imponente figura de la luna, y coloquios simpáticos del cantante.

En el recital participó en calidad de invitada la cantante Zoraida Santiago, quien con su melodiosa voz hizo una linda interpretacion de los temas, Luna sobre el Condado y Di corazón, ambos de la desaparecida compositora Sulvia Rexach; y De ti mujer, tema que grabó en uno de sus primeros discos.

También impregnó de filin el cantante y compositor Rocco Gandía, con sus dos canciones, Mi luna y Ángel de la guarda, que cantó al unísono con el público.

Uno de los momentos mágicos y apreciados por el público fue la interacción que tuvo el vocalista con ellos al bajar de escenario, con su violinista, e interpretarles sus temas de serenata solicitados.

Danny Rivera complació a la audiencia con las canciones que le pedían a coro y si no estaban en el repertorio seleccionado, las cantaba a capella, como sucedió con su clásico tema, “Mi viejo”.

También reconoció a los fans que vinieron de distintos lugares de Estados Unidos a verlo. “Gracias por venir de tan lejos a verme... esa son las cosas significativas y más grandes para un artista, el apoyo del público”, sostuvo.

Dedicó a las madres presentes la danza

“Madre”, del cantautor Rafi Escudero. Mientras lo interpretaba, en el escenario se proyectó un visual de su fallecida progenitora, Sabina Méndez, que fue recibido con ternura y agradecimiento de las damas presentes.

El cantante continúo su recorrido musical de una veintena de canciones con la danza “Cómo las margaritas”, seguida de “Caminito de tu amor, Retrato de amor , Madrigal , Irresistible, Vieja luna, Total, Que seas feliz y Ahora seremos felices. Estas canciones fueron de las más aplaudidas.

Antes de finalizar su concierto, Danny Rivera presentó a sus músicos: Carlos “Pachito” Vega (director musical, requinto, cuatro, guitarras, coro), Luis “Wiso” Vélez (bajo), Oscar “Lolo” Figueroa (batería, cajón), Emma Colón Zayas (percusión), Daniela Santos (piano, teclado), Juan Carlos Rodríguez (guitarras), Frank “Frankie” Torres (violín), Yaritza Zayas (coro), y Patricia Vásquez (coro).

Se despidió del público con el tema “del El toro y la luna”, flamenco que puso a remenearse al público, que no quería marcharse del lugar y entonó a coro el tema patrio de Danny Rivera, “Yo quiero un pueblo”.